EMEEQUIS.– Unas horas después de que la UNAM le abriera la puerta para contener por la dirección general de la Facultad de Derecho, Lorenzo Córdova cerró la posibilidad de participar en la sucesión en la que el rector Enrique Graue tiene mano para incidir en la designación de ese importante puesto académico.
En los corrillos de la Máxima Casa de Estudios comentan que el senador Ricardo Monreal, profesor en la Maestría de Derecho de la UNAM, cabildeó con la nomenklatura de las áreas jurídicas universitarias que el consejero presidente del INE apareciera en tan distinguida lista, difundida discretamente el lunes 2 de marzo. El mensaje de Morena pretendía abrirle un camino para dejar el organismo electoral.
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Para el martes 3 en la mañana, Córdova tuiteó: “Supe que he sido propuesto por miembros de la comunidad de la @DerechoUNAMmx para contender por su dirección. Es un honor y agradezco la deferencia, pero estoy concentrado en mi labor en la presidencia del @INEMexico que termina en abril de 2023”.
El nombre de Lorenzo Córdova Vianello, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), apareció en una lista de 30 candidatos para dirigir la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Carta en la que Córdova declina ser aspirante a la Facultad de Derecho.
LA MANIOBRA DE MORENA
Los desencuentros entre el INE de Córdova y la llamada 4T pasan por la decisión de las autoridades electorales para que las fotos de los candidatos presidenciales de 2018 no aparecieran en las boletas electorales –un asunto que enfadó a AMLO– y por la resistencia de varios consejeros a tener un salario inferior al del presidente de México, entre otros diferendos que desde el arranque del sexenio tienen bajo la mirada presidencial al consejero presidente, quien podría haber encontrado en la UNAM, su alma máter, una alternativa para salir por la puerta de enfrente del INE.
Las versiones de que sea empujado a dejar el organismo electoral son fundadas. En noviembre del año pasado, Sergio Carlos Gutiérrez Luna, diputado federal de Morena, presentó una iniciativa que propone reducir el tiempo de mando del Consejo General del INE de nueve a tres años. Entre sus argumentos resaltaba que el periodo tan amplio fomenta la concentración de funciones en una sola persona, en este caso, Córdova Vianello. La intentona morenista ha sido archivada, por lo pronto.
Actualmente el INE está en proceso de renovación de cuatro consejeros, que serán elegidos por los diputados federales, en un congreso en el que Morena, el partido en el poder, tiene amplia mayoría. A finales de enero, Lorenzo Córdova advirtió sobre el riesgo de que esa designación se haga a modo.
Ante esto, AMLO declaró que “están muy molestos los del INE, o sea están desquiciados. Durante mucho tiempo, con todo respeto, se hicieron de la vista gorda ante los fraudes electorales y ya no es así, ya no les funciona eso”.
A pesar de ello, en el entorno del Córdova no se observa la menor intención de buscar una puerta de salida: está decidido a dejar el cargo en 2023, un año antes de las presidenciales. En la UNAM, en cambio, aseguran que el rector Graue dio el visto bueno para que apareciera en la lista. La maniobra pretendía que el doctor en Teoría Política por la Universidad de Turín, Italia, considerara la posibilidad de regresar de lleno a las aulas, para dejar el camino libre a Morena, el partido que intenta cambiar el equilibrio de fuerzas dentro del INE.
Lista de aspirantes entre los que aparece Córdova.
LOS OTROS ASPIRANTES
Los 30 aspirantes fueron propuestos por personal académico, alumnos y trabajadores de la Facultad de Derecho, según lo indica la Legislación Universitaria –aunque miembros de la comunidad dicen que son los mismos aspirantes los que se anotan en la lista– y la circular SGEN/0031/2020 emitida por el Secretario General, Dr. Leonardo Lomelí.
No sólo Córdova Vianello resalta de entre los 30. Aparece también Luis Raúl González Pérez, extitular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) que el 9 de enero pasado fue nombrado nuevo coordinador del Programa Universitario de Derechos Humanos de la máxima casa de estudios. Esa designación fue realizada directamente por el rector, Enrique Graue Wiechers.
María del Socorro Marquina Sánchez, egresada y docente de la facultad, también está en el listado. Ella fue funcionaria de la Secretaría de Educación Pública en los sexenios de Ernesto Zedillo y Enrique Peña Nieto.
Marquina Sánchez fue señalada en 2015 por haber realizado trámites indebidos en beneficio de la sobrina de Salvador Malo Álvarez, quien fungía como director general de Educación Superior Universitaria.
Aparecen también las académica Socorro Apreza Salgado, Sara Arellano Palafox, María del Carmen Arteaga Alvarado y María Elena Orta García, que son de las 10 mujeres de la lista de 30 que podrían dirigir la Facultad, si Graue así lo define.
Todas y todos los candidatos cumplen con lo estipulado en el artículo 39 del Estatuto General de la UNAM que señala que todos los directores de facultades o escuelas deberán ser mexicanos de nacimiento, mayor de 30 años y menor de 70, tener una distinguida carrera en docencia, investigación o divulgación científica, llevar una vida honorable, haber dado servicios docentes en la facultad y poseer uno de los títulos que otorgue el área al que están aplicando.
EL RECTOR GRAUE LLEVA MANO
De esos 30 aspirantes saldrá la persona que dirija la Facultad. De acuerdo con el artículo 37 del Estatuto General de la UNAM, el rector Enrique Graue definirá una terna para que la Junta de Gobierno defina quién dirigirá la Facultad de Derecho.
La terna electa por Graue difícilmente será desechada, pues los consejos técnicos sólo podrá ser impugnada total o parcialmente si los candidatos no llenan los requisitos que señala el artículo 39.
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En el caso de Córdova Vianello, los requisitos parecen cumplirse. Es mexicano de nacimiento, tiene 48 años y lleva más de una década de docencia en la Facultad que podría dirigir, asimismo su título universitario tiene el sello de la UNAM y es egresado de la misma Facultad en la que da clases.
Pero no, Lorenzo no quiere, por ahora, regresar de lleno a las aulas.
@emeequis