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EMEEQUIS.– Mediante un video difundido en redes sociales, la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, confirmó el hallazgo de los cuerpos de los dos sacerdotes jesuitas, Javier Campos y Joaquín Mora, y el del guía de turistas, Pedro Palma, asesinados la tarde del lunes en una iglesia de Cerocahui, en el municipio de Urique, Chihuahua.
“Gracias a un esfuerzo de la Fiscalía General del estado, comandada por el Maestro Roberto Fierro, hemos logrado localizar y recuperar, y esto comprobado por medicina forense, los cuerpos de los sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, y del guía de turistas, Pedro Palma”, señaló la gobernadora frente a la cámara.
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Durante la tarde del lunes 20 de junio, de acuerdo con los reportes periciales, ambos sacerdotes auxiliaron Pedro Eliodoro Palma, quien tras sufrir una agresión buscó refugiarse en la iglesia, sin embargo, los sicarios lo alcanzaron y lo ultimaron junto a los miembros de la organización jesuita.
Además se reportaron al menos cuatro personas desaparecidas relacionadas con la masacre, sin embargo, aún no hay detenidos.
Autoridades de Chihuahua aplicaron mecanismos de protección en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional.
El hallazgo de los tres cuerpos está sustentado en “medicina forense”, dijo la gobernadora.
CONDENA Y RECOMPENSA
En conferencia de prensa, esta mañana, la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, en voz de su titular, Roberto Javier Fierro Duarte, anunció una recompensa de 5 millones de pesos a quienes brinden información útil y veraz para dar con el paradero de José Noriel Portillo, alías “El Chueco”, presunto asesino de los sacerdotes y el guía de turistas, a quien también se le imputa el delito de delincuencia organizada.
La Fiscalía ofreció 5 millones de pesos por la captura de “El Chueco”.
Inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública Federal, apunta que “El Chueco” es líder de una célula criminal y narcotráfico al servicio del Los Salazar, agrupación delictiva que forma parte del Cártel de Sinaloa y que desde el 2018 se giró una orden de aprehensión en su contra por el homicidio del profesor Patrick Braxton Andrews, ciudadano estadounidense que viajaba en Barrancas del Cobre y la Sierra Tarahumara.
De igual forma, en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que la zona de la Sierra Tarahumara desde hace tiempo se encuentra padeciendo el control por parte del crimen organizado.
“Ahora lo que nos importa más es encontrar los cuerpos… ya se ha avanzado en la investigación… y detener a los responsables”, refirió esta mañana.
En tanto, el día de ayer, la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús condenó los hechos y emitió un comunicado en el que reclaman justicia y protección, además, resaltan que las agresiones no fueron aisladas, puesto que la violencia y la impunidad es una constante en la región de la Sierra Tarahumara.
“Todos los días hombres y mujeres son privados arbitrariamente de la vida, como hoy fueron asesinados nuestros hermanos. Los jesuitas de México no callaremos ante la realidad que lacera a toda la sociedad (…) al denunciar lo ocurrido hacemos notar también el dolor que vive nuestro pueblo por la violencia imperante y nos solidarizamos con tantas personas que padecen esta misma situación”, señala parte del comunicado que fue difundido por la institución clerical.
INDIGNACIÓN EN LA IGLESIA
Tras confirmarse el hallazgo de los cuerpos, por la tarde de hoy la Provincia Mexicana de la compañía de Jesús, emitió otro comunicado en el que señalan que la gobernadora del estado se comunicó con el P. Provincial Luis Gerardo Moro Madrid, S.J. a las 16:15 “sobre el hallazgo de tres cuerpos, entre los que probablemente se encuentran nuestros hermanos Javier Campos Morales, S.J. y Joaquin César Mora Salazar, S.J.”.
La Compañía de Jesús pidió “certidumbre científica” en la identificación de los cuerpos.
Anunciaron que irán al lugar dónde se encuentran los cuerpos para su identificación y exhortan a que se priorice la certidumbre científica y “una comunicación respetuosa de las víctimas, sus familiares y comunidades dolientes”.
Este miércoles, durante su audiencia, el Papa Francisco lamentó el asesinato de los líderes clericales y recriminó la violencia que prevalece en México.
“Expreso mi dolor y tristeza por el asesinato del otro día de dos religiosos, hermanos míos jesuitas, y un laico. ¡Cuántos asesinatos en México!”, mensaje que también fue difundido en su cuenta oficial de Twitter.
@emeequis
