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El almirante Ortiz Guarneros dijo que el obispo entró a un hotel por su propia voluntad con otra persona. Foto: Especial.
EMEEQUIS.– El almirante en retiro José Antonio Ortiz Guarneros, titular de la Comisión Estatal de Seguridad Pública (CES) de Morelos, contradijo al fiscal Uriel Carmona en la hipótesis del secuestro exprés del obispo Salvador Rangel, pues argumentó que hay grabaciones que demuestran que entró por su propia voluntad a un motel en compañía de otro hombre.
“Se hicieron declaraciones que fue un secuestro exprés, nosotros pensamos que no, pero el fiscal tendrá que demostrar por qué sí fue un secuestro exprés, en base a qué lo dijo. Los que están en la política están usando esto para denostar el actuar de la seguridad en el estado.
“Hasta donde sabemos entró voluntariamente al motel con una persona del mismo sexo. Esa persona después se retiró. Es todo lo que sabemos. Fuimos a pedir información pero ya había llegado la Fiscalía y no nos permitieron”.
EL FISCAL Y EL SECUESTRO EXPRÉS
El fiscal de Morelos afirmó el 29 de abril que la principal línea de investigación sobre la desaparición de Salvador Rangel Mendoza, obispo emérito de Chilpancingo, era un secuestro exprés que tuvo la finalidad de “privarlo de algunas cantidades de dinero”.
Posteriormente el fiscal dio a conocer que se abrió una carpeta de investigación por el presunto secuestro exprés en agravio del obispo emérito de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza. El posible móvil sería el robo de dinero de sus cuentas bancarias en cajeros automáticos.
El obispo Rangel Mendoza desapareció desde el 27 de abril, pero se informó públicamente del hecho el 29 de abril, cuando llegó a un hospital de Cuernavaca. La Fiscalía no dio mayores detalles sobre posibles captores, argumentando que el religioso todavía no podía rendir declaración, debido a que se estaba recuperando de una intoxicación por drogas que le habrían sido administradas contra su voluntad.
Primero se informó que las sustancias eran cocaína y benzodiazepina. Sin embargo, medios locales mencionan este jueves que el parte médico también incluye que traía pastillas de Viagra. “Fue localizado en un establecimiento público, con deterioro neurológico a expensas de estupor, sin pertenencias y con un blister de 2 pastillas de sildenafil”.
El Viagra, cuya sustancia activa es sildenafil, se prescribe para casos de disfunción eréctil o hipertensión pulmonar.
El Sol de Cuernavaca señaló que podría ser este jueves 2 de mayo cuando Rangel Mendoza, rinda su declaración ante el agente del ministerio público, luego de 72 horas de haber sido localizado con vida, tras presuntamente sufrir un secuestro exprés.
CRONOLOGÍA DE LOS HECHOS
El 30 de abril, Pedro Martínez Bello, abogado del obispo, compartió ante medios la cronología de lo sucedido, en la que también asegura que se trató de un secuestro exprés. Dijo que el sábado 27 de abril el obispo salió de su domicilio y se perdió contacto con él, porque dejó sus celulares. Al otro día empezaron a hacer movimientos con sus tarjetas bancarias en diferentes puntos de la ciudad.
“La diócesis del estado de Guerrero, el obispo me contacta, me contacta el padre Tomás (Martínez Rivero), que está a cargo de la iglesia de Santa Prisca en Taxco, para que pueda yo asesorarles jurídicamente. Presentamos la denuncia el día de ayer (29 de abril) a las 9 de la mañana.
“Aportamos elementos jurídicos para que la Fiscalía acelerara los tiempos y se diera la búsqueda y localización de monseñor Rangel. Esto en coordinación con el gobernador del estado, Samuel Sotelo, porque autorizaron incluso que el helicóptero sobrevolara diferentes puntos de la ciudad.
“Al presionar de esta forma se da con la ubicación del obispo Rangel, fue así como sucedieron las cosas. Fue dejado en Ocotepec, a las afueras de la ciudad capital Cuernavaca, no se sabe todavía porque no hemos podido entablar un diálogo con el obispo Rangel.
“Le suministraron algunas sustancias. nos dicen los médicos que pudo haber sido cocaína. No ha estado de manera consciente el obispo. También sugiere el médico que le demos un espacio de por lo menos tres días para que a partir de ahí pueda él rendir su declaración ante la Fiscalía General de Justicia.
“Sabemos que fue un secuestro exprés, que lo retuvieron, le quitaron una camioneta, estuvieron ‘ordeñando’ las tarjetas en diferentes puntos de la ciudad. Esto fue el domingo en la madrugada, estuvieron haciendo compras, retiros. La Fiscalía está llevando a cabo las investigaciones para tener el circuito cerrado de los cajeros automáticos”.
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