SOBRE EL AUTOR
EMEEQUIS.– La jefa de Gobierno y su equipo más cercano acaban de recibir un mazazo de realidad política: la información no se puede ocultar y menos cuando se trata de asuntos que afectan a la ciudadanía.
Claudia Sheinbaum tendrá que hacer lo que no quería, explicar con claridad por qué no aceptó el peritaje de una empresa que ella misma contrató y que dijo que era la mejor del mundo.
Pero lo hará en una situación de mayor debilidad, porque lo sustancial del informe se conoció gracias al diario El País.
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Será difícil menospreciar lo que ahí se dice sobre la falta de mantenimiento en la Línea 12 y cómo resultó ser uno de los factores que, junto al mal diseño de la obra, propiciaron la catástrofe. Es decir, se pudo evitar, no era una fatalidad.
La falta de mantenimiento no se puede negar, e inclusive significó incendios, como en el edificio central del Sistema Colectivo de Transporte, inundaciones y diversas descomposturas. Ahí estaba y está el problema.
En todo caso, Sheinbaum tendrá que litigar ahí donde no le gusta, ante los medios de comunicación, donde no puede imponer agenda alguna y más bien tendrá que convencer.
Sheinbaum, por lo demás, está experimentado un desgaste que compromete seriamente sus aspiraciones en el 2024, porque primero tiene que salir librada de este 2022.
EL METRO Y EL MISTERIO DE FLORENCIA SERRANÍA
Uno de los misterios del último año, es cómo Florencia Serranía no rinde cuentas, vamos, ni siquiera la interrogó la Fiscalía de la Ciudad de México, sobre lo ocurrido en la Línea 12 cuando ella era la directora del Metro, pero se le premia con cargos en Conacyt.
Hay que recordar que la propia Serranía en su momento anunció que había asumido las labores de mantenimiento, porque no había nadie designado para esa tarea.
No es un juego. Basta recordar que murieron 26 personas para no andar con dispensas legales para los aliados y los amigos.
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Cada día que pasa es más costoso para el Palacio del Ayuntamiento el que Serranía no sea molestada en lo más mínimo y eso que saben que la fiscal Ernestina Godoy no hará nada que pueda afectar a la jefa de Gobierno.
Algo es seguro: con lo que se dio a conocer sobre el peritaje que hizo la empresa DNV, cada vez es más difícil el poner en marcha los mecanismos de encubrimiento que acostumbran en la 4T.
AHORA LE TOCÓ A DOS PERIODISTAS
Este lunes fueron asesinadas las periodistas Yessenia Mollinedo y Sheila Johana García en Veracruz. En lo que va del año, 11 periodistas han muerto en situaciones de violencia.
Se llegó a un punto en que las condenas de los hechos que hacen las autoridades suenan huecas, porque por desgracia son preludio de las próximas muertes, porque no hay una política de seguridad preventiva.
La situación es dramática y peligrosa. Los perpetradores de estos hechos los siguen cometiendo, porque saben que lo más probable es que sus crímenes queden en la impunidad. Esto es lo que urge revertir, lo que no puede ser, en un país que aspira a ser una sociedad de derechos.
PELIGRO EN EL AIRE POR LA CONVIVENCIA DEL FELIPE ÁNGELES Y EL BENITO JUÁREZ
Lo que faltaba. La navegación aérea se va tornando peligrosa. El Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo advirtió que desde que se rediseñaron las rutas de aproximación a la Ciudad de México, por el proyecto del AIFA, los incidentes han aumentado en un 300%.
Todas las alarmas se prendieron el pasado fin de semana, cuando dos aviones de Volaris pudieron colisionar, pero lo cierto es que son cada vez más los profesionales de estos asuntos los que están haciendo llamados para que se haga algo al respecto.
Desde 2018 se advirtió de los problemas que se generarían una vez que estuvieran dos terminales aéreas en funcionamiento.
La preocupación más grave es por lo que podría ocurrir una vez que el AIFA tenga una cantidad de vuelos razonables y entonces sí se tengan que desplegar todas las capacidades técnicas.
Más allá del número de reportes y de alertas, ya que el gobierno no acepta que sean tantos, es evidente que algo dejó de funcionar y que hay que repararlo.
@emeequis
