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Oposición al voto popular para elegir juzgadores toma fuerza. Foto: Cámara de Diputados.
EMEEQUIS.– Posiciones encontradas se expusieron en la segunda parte de los diálogos por la reforma judicial, esta vez en la Universidad de Guadalajara. Mientras que Ricardo Monreal puso como ejemplo de excesos el caso del juez que ordenó al Tribunal Electoral designar a sus dos magistrados que le faltan, el abogado Juan Alberto Ruvalcaba se llevó aplausos al pedir a legisladores que no desmantelen el poder judicial, porque no se imagina a un juez haciendo campaña y ofreciendo absoluciones.
En este segundo foro, el tema a discutir fue “Conformación y reorganización del Poder Judicial de la Federación”.
El grupo a favor de la reforma, integrado principalmente por políticos de Moena y aliados, reconoció la necesidad de modificar al Poder Judicial debido a falta de entendimiento con el Ejecutivo e, incluso, algunos participantes mencionaron que es “ilógico” que existan un poder autónomo e independiente, así como el “uso de la ouija para interpretar la Constitución”.
Mientras que aquellos que se mostraron en contra de la reforma constitucional, advirtieron la posibilidad de la pérdida de autonomía, la coacción de votos, intervenciones de partidos políticos, la pérdida de la noción de justicia y se mostraron en contra de que los integrantes del Poder Judicial hagan campaña. A su favor, anegaron por un proceso de selección e idoneidad.
Uno de los primeros morenistas en abrir el foro fue Ricardo Monreal, quien dentro de su discurso reconoció que la reforma al Poder Judicial viene enlazada con el deterioro en la relación que el actual presidente López Obrador ha tenido con dicho Poder.
El senador también mencionó que esta reforma viene a causa de una falta de “autorregulación” del Judicial y a la necesidad de “una reforma que acote los abusos de los jueces de distrito y de aquellos que se supone imparten justicia” , agregó que existe nepotismo, que no beneficia al Poder judicial que no lo beneficia.
“Varias veces comenté en mi trato frecuente con el presidente la necesidad de presentar iniciativas para reformar este poder, pero él no compartía tal parecer.
“Con él dialogamos profundamente. Fue hasta el cambio de la presidencia en la Corte, cuando, concluido el mandato del presidente Zaldívar y tras el nombramiento de la nueva presidenta, comenzó a cambiar la relación entre poderes. Escudándose en que se debía mantener autonomía e independencia, se empieza a tensar la relación.
“Los signos y actos jurisdiccionales emitidos por los tribunales comienzan a separarse y a distanciarse de lo que era una relación institucional. La opinión sobre temas emblemáticos de Estado y la invasión frecuente por parte del Poder Judicial a los trabajos o determinaciones del Ejecutivo y del Legislativo comenzaron a deteriorar la relación”.
El senador añadió que pese a que mucho pensaban que no se lograría la mayoría calificada, Morena la logró:
“La falta de pericia, entendimiento racional e inteligencia política de quien representaba a la Corte y representa, provocó, provoca y provocará que la rispidez y la mala relación fueran un constante en los asuntos públicos que a los Poderes les quedaban atribuidos de acuerdo con la Constitución y la ley. Esto detonó que el presidente López, el 5 de febrero, en base a sus facultades, presentará 20 iniciativas de reforma a la Constitución y a leyes reglamentarias, la cual también contempla reformas al Poder Judicial: 16 artículos de la Carta Magna y 11 transitorios (…)Pero también, el día de la presentación y posteriormente, el Poder Judicial y sus afines expresaron inconformidad, protestas y, hasta donde recuerdo, una actitud fuera de lo normal, diciendo que jamás lograríamos la mayoría calificada y, por tanto, era quimera lo que nos proponíamos”.
Recalcó que uno de los ejemplos de abusos de jueces es la orden que dio uno de ellos al Tribunal Electoral para que designe a sus dos magistrados faltantes en un plazo de 24 horas, porque no es su atribución.
“LOS JUECES NO DEBEN HACER CAMPAÑA”
Quien no concordó con lo mencionado con Ricardo Monreal fue el abogado Juan Alberto Ruvalcaba, quien mencionó que la legitimidad democrática de los ministros se basaba “en la decisión del presidente de proponerlos y del senado de designarlos”.
Asimismo agregó que los jueces no deben hacer campaña: “Los jueces deben estar de la manera más humana, más sensible y más empática dictándole sentencias, abonando a la justicia y a la paz que este país reclama”. Agregó que el Tribunal de Disciplina no puede ir en contra de las decisiones tomadas por los ministros, pues se coarta el sentido de independencia.
Además, Juan Alberto Ruvalcaba mencionó: “La elección popular de las y los jueces y magistrados, según la iniciativa de reforma, provocaría, vía la propuesta de candidatos a jueces por el presidente y por los senadores y diputados, la intervención indirecta pero determinante de los partidos políticos en su elección. No sería una auténtica elección popular. No queremos un Poder Judicial que se deba, como ya sucede en algunos poderes judiciales locales, a cuotas de partido. Tampoco queremos Poderes judiciales en los estados copta porque en los estados debe reforzarse la carrera judicial. La justicia necesita presupuesto suficiente e irreductible para que haya jueces suficientes, especialmente en la justicia cotidiana”.
Mientras que el abogado Marco del Rosario Rodríguez, de la Barra Mexicana Colegio de Abogados, mencionó que es falso que exista una falta de legitimación democrática: “Los jueces constitucionales, no solamente en los sistemas jurídicos sino en cualquier parte del mundo, se legitiman a través de sus sentencias, las cuales deben ajustarse a los parámetros de regularidad constitucional”.
Añadió que la justicia se relaciona de manera estrecha con que “los órganos jurisdiccionales estén ajenos a cualquier interés o pretensión de parte de grupos políticos, económicos o delincuenciales, ya que, de lo contrario, sus decisiones al momento de resolver una litis estarán sesgadas y coaccionadas”. El abogado añadió que “un proceso de elección no garantiza que los órganos de poder, así como los partidos políticos, se mantengan neutrales; la cooptación de estos será inevitable”.
Javier Hurtado, constitucionalista y actual Presidente del Colegio de Jalisco, en su intervención planteó que la autonomía debería aplicarse a la función jurisdiccional, y no al Poder Judicial como entidad. Expresó que era ilógico buscar poderes autónomos e independientes: “No puede haber en el mundo ni en ninguna democracia constitucional y de derecho, un Poder autónomo e independiente, eso es ilógico, es absurdo y una contradicción ilógica, hay que tener cuidado con eso”.
El constitucionalista criticó la forma en que los jueces interpretan la ley e hizo una comparación con el uso de la ouija. En una posterior intervención añadió que se trataba de un “prejuicio” el no creer viable el hecho de elegir los integrantes del Poder Judicial mediante el voto popular.
Por su parte, la excandidata de la coalición encabezada por Morena a la gubernatura de Jalisco, Claudia Delgadillo González mencionó: “Nuestro modelo actual de impartición de justicia se caracteriza por ser un sistema viejo, un sistema conservador, que lamentablemente no está diseñado para reparar a las víctimas ni para impartir justicia”.
La actual diputada por el partido Verde expresó que ya existía un vicio dentro de la elección de jueces, magistrados y ministros. Reiteró que las decisiones de pueblo mexicano no se respetan y puso como ejemplo el supuesto fraude electoral del que fue víctima:
“La independencia del Poder Judicial está frecuentemente en entredicho, ya que la designación de jueces y magistrados a menudo responde a intereses políticos (…) desde mi experiencia personal, quiero hoy plantear un asunto fundamental para nuestra vida democrática: la justicia electoral y el respeto a la voluntad popular. Es muy urgente reformar y fortalecer las instituciones encargadas de supervisar y calificar los procesos electorales para evitar violaciones a la voluntad del pueblo.
En Jalisco enfrentamos un lamentable fraude electoral, y es un claro ejemplo de cómo las autoridades electorales pueden manipular los resultados en perjuicio de la decisión de nuestros habitantes”.
El discurso de la candidata no fue bien tomado por todos los presentes, al considerarlo un acto de propaganda política, sin embargo, la moderadora solicitó respeto ya que se había escuchado a todos los presentes, estuviese o no de acuerdo con lo que tenían que decir.
El segundo debate de los nueve que se esperan duró cerca de tres horas y media, teniendo principal participación de simpatizantes con la reforma constitucional. Se espera que el tercer debate se dé el día de mañana en el estado de Toluca.
@emeequis
