SOBRE EL AUTOR
EMEEQUIS.– De acuerdo con datos de la cuenta pública 2020 de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), no aparecen 100 ventiladores Ehécatl que supuestamente el Conacyt entregó al Insabi y este al ISSSTE.
Según los resultados de las auditorías, no existen actas de entrega-recepción de esos equipos.
En los reportes, dentro del grupo funcional de Desarrollo Social, que contiene a las organizaciones públicas relacionadas con la salud, se consigna en la página 168 que dentro del “Convenio marco de colaboración para apoyar la atención de la pandemia originada por el virus SARS-COV-2 (COVID-19)”, ni el ISSSTE ni el Insabi contaron con las actas de entrega recepción de 100 ventiladores marca CIDESI, modelo EHÉCATL 4T, ni de los materiales hospitalarios, que el Insabi envió al ISSSTE.
Ante esta anomalía se iniciaron nueve Promociones de Responsabilidad Administrativa Sancionatoria (PRAS).
En la página 168 del reporte se consigna la falta de actas de entrega-recepción.
CADENA DE IRREGULARIDADES
Estos equipos se suman a los 200 ventiladores que, según el Conacyt, fueron enviados a Cuba, 50 del modelo Ehécatl y 150 del modelo Gätsi, de los que no se tiene certeza de su paradero, ya que hasta la fecha no ha podido demostrarse documentalmente.
Para el caso de los supuestamente donados, la Cancillería, mediante oficio UDT-7282/2021 de fecha 22 de octubre de 2021, informó que no se habían entregado.
EMEEQUIS se encuentra en espera de respuesta tanto de la Cancillería, como de la Presidencia, la Sedena y la Semar, en virtud de que fueron las instituciones que el Conacyt señala como responsables de la donación a la embajada de Cuba, que tampoco accedió a corroborar esta información.
En una primera respuesta a través del portal de transparencia la SRE reiteró que no posee información relacionada con la entrega y sugiere que se realice la consulta ante el Conacyt, que tampoco ha respondido hasta el momento.
Conacyt refutó esta nota en la mañanera y EMEEQUIS respondió en un hilo de Twitter que la nota está sustentada en documentos.
TE RECOMENDAMOS: VENTILADORES DE LA 4T: CON RETRASOS, SOBRECOSTOS Y REGALADOS A CUBA
Según la información proporcionada por el gobierno de la República, y recopilada por EMEEQUIS en una investigación publicada el pasado 17 de enero, el presidente encargó al Conacyt la producción de ventiladores invasivos para su uso durante la pandemia, pero resultaron un 88% más caros de lo que originalmente fueron considerados, se entregaron 18 meses después de la fecha ofrecida y no aparece por ningún lado, hasta el momento, la documentación que compruebe su donación al país caribeño.
Tampoco aparece, de acuerdo con la ASF, cuál fue el destino final de 100 de esos equipos que fueron entregados al ISSSTE a través del Insabi, con lo que, sumados a los 50 que supuestamente se entregaron a Cuba, integran el 30% del total de 500 equipos que según el Conacyt se fabricaron de este modelo a un costo de 257 mil 890 pesos por cada uno de ellos.
TE RECOMENDAMOS: VENTILADORES DESAPARECIDOS, DINERO PERDIDO DEL AEROPUERTO Y MÁS: ESTO ENCONTRÓ LA ASF EN LA 4T
Durante las auditorías que practicó la ASF a la cuenta pública 2020, aparecen diversas irregularidades relacionadas con los equipos de asistencia respiratoria, que además de la falta de actas de entrega-recepción de los Ehécatl, se encuentra que 650 ventiladores pagados a un proveedor inglés no fueron entregados y otros 2 mil 250 equipos no se adjudicaron adecuadamente de acuerdo a la normatividad.
Los ventiladores Gätsi y Ehécatl que fueron presentados en la mañanera. Foto: Cuartoscuro.com.
Incluso la ASF detectó un caso de una compra a sobreprecio por 250 ventiladores, con una ampliación de 50 equipos más por parte del ISSSTE, justificando la adjudicación y el sobreprecio por la rapidez en la entrega.
Sin embargo esta empresa, Multicorporación Brexot SA de CV, no existe en el domicilio declarado. Fue constituida en enero de 2017 como una organización de outsourcing de entre otros 67 rubros principales, con un capital de 50 mil pesos y cuyas socias aparecen en los padrones de beneficiarios de programas sociales. Aún así celebraron un contrato por más de 800 millones de pesos.
@salamillab
