EMEEQUIS. En agosto de 2020, la Unidad de Asuntos Internos (UAI) de la Guardia Nacional (GN) elaboró un breve Análisis de las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas de la institución, que cumplía entonces su primer año de operaciones como la corporación de seguridad pública más numerosa y ambiciosa en la historia del país.
Sin embargo, el Análisis FODA, como se le conoce, mostró muchas más Debilidades y Amenazas que Fortalezas y Oportunidades, en una institución que entonces contaba con 90 mil integrantes, más de 150 cuarteles e instalaciones construidas en varios puntos del territorio y enormes dificultades para reclutar a nuevos elementos no provenientes de las filas del Ejército, de la Fuerza Aérea y de la Armada de México.
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El documento, fechado el 31 de agosto de 2020, es uno de los cientos de miles obtenidos por el grupo de hackers denominado Guacamaya, y muestra en cinco hojas un panorama complejo en el que, contra 4 Fortalezas y 8 Oportunidades, se erigen 5 Debilidades, 5 Amenazas y al menos 16 puntos negativos sobre la situación de los integrantes y sus mandos y otros 14 puntos relacionados con aspectos administrativos de la GN, destacando las “fugas de información, la ausencia de información de otras instituciones para conocer los antecedentes laborales y médicos de los integrantes asignados de otras instituciones de seguridad”, entre otros puntos relevantes.
La principal preocupación y hallazgo del FODA tiene qué ver con la disciplina de los agentes y mandos, destacando como “Variables que impactan en la disciplina de la Guardia Nacional” aspectos como la “falta de valores, falta de asunción del ejercicio de la facultad de mando, falta de disciplina, falta de ética, falta de capacitación, no respetar las jornadas laborales, falta de supervisión, desconocimiento de la normatividad”.
En la lista de las variables se menciona también que no hay consecuencias por las infracciones cometidas por el personal, hay poca claridad en la línea de mando y falta de directrices y de elementos probatorios y, sobre todo, “falta de identidad institucional para lograr una visión integral”, señala el Análisis FODA extraído por los hackers de Guacamaya.
DIAGNÓSTICO CRUDO
La revisión del Análisis FODA acerca de la Guardia Nacional a poco más de un año de su entrada en operaciones –el 1° de julio de 2019, posterior a la publicación, el 28 de junio de ese año, del Decreto de su creación en el Diario Oficial de la Federación– señala 4 Fortalezas y 8 Oportunidades como los primeros aspectos a destacar en la institución.
En las Fortalezas se destaca que la corporación cuenta con una “normatividad (Ley de la Guardia Nacional y Reglamento)” para actuar y comenzar a cumplir las misiones asignadas. En el segundo aspecto señalado, pero que choca con el propio contenido del análisis, es el del origen de los integrantes de la Guardia Nacional, el cual se considera como una fortaleza en estos términos: “la formación que el personal tiene desde sus instituciones de origen favorece la disciplina”.
Esta apreciación choca con lo señalado líneas más adelante, ya que en el FODA la cuestión disciplinaria aparece como una debilidad, como una amenaza y una de las 16 variables de conducta que afectan a la tropa y a los mandos de la institución.
La cuarta y última fortaleza identificada es la de poseer una “base de datos con registros históricos que sirven de apoyo (en estadística e inteligencia para la investigación)”.
En las 8 Oportunidades detectadas sobresalen el hecho de que la Guardia Nacional es una “institución de nueva creación”, que tiene “el respaldo ciudadano y político”, que permite “establecer programas obligatorios de formación, capacitación y profesionalización” y que su “estructura institucional se encuentra en vías de desarrollo”.
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El problema del Análisis FODA hecho en agosto de 2020 surge al revisar las 5 Debilidades detectadas, siendo la primera la “Inexistencia de normas complementarias en materia disciplinaria (manuales)”.
La segunda de las debilidades es la “Falta de operación de los Consejos Disciplinarios”, mientras que la tercera debilidad detectada es la de la necesidad de “Sensibilización de los integrantes respecto del actuar policial”.
El penúltimo aspecto es el más importante y crucial en las debilidades detectadas y es el de la “Falta de identidad institucional (el personal no se siente identificado con la Guardia Nacional)”.
En el último lugar aparece la “Falta de consolidación del Consejo”, organismo en torno al cual se construyen y aplican todas las medidas disciplinarias que le dan cuerpo y solidez a la GN.
A nivel administrativo, la Unidad de Asuntos Internos (UAI) de la Guardia Nacional detectó en agosto de 2020 14 aspectos como parte de las variables que impactaban la integración y determinación de los expedientes bajo sui responsabilidad.
En este apartado se señalaban aspectos como la falta de participación del quejoso o denunciante ante casos en los que se acusaba de algo a los elementos de la corporación, así como la falta de elementos probatorios y, en consecuencia, la imposibilidad para acreditar conductas inapropiadas “por falta de evidencias”.
Además, las “fugas de información en casos delicados, que son de difícil detección”, aparecían como uno de los aspectos fuera de control al interior de la Guardia Nacional.
Finalmente se menciona como otra variable importante la “interposición de amparos contra el resultado de la evaluación del control de confianza” como un tema que afecta el correcto funcionamiento de la Unidad de Asuntos Internos de la Guardia Nacional.
@JorgeMedellin95
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