Ayer criticó la marcha que llenó el Zócalo y otras plazas del país y hoy también. Foto: Especial.
EMEEQUIS.– La de hoy fue una conferencia mañanera prácticamente sin preguntas de la prensa, dos o tres cuando mucho. El presidente hizo un monólogo para lanzar ataques contra la Marcha por la Democracia del domingo y quienes la encabezaron.
Antes, entre las pocas preguntas que permitió, una reportera lo cuestionó sobre las críticas internas en Morena por la candidatura de Pepe Chedraui, empresario de Puebla ligado a la élite priísta, como candidato a la alcaldía del estado.
El presidente no quiso responder, dijo que se trataba de una pregunta de tipo electoral, y no podría meterse en esos temas.
Pero a lo largo de la conferencia no tuvo límites -que la ley le impone- para lanzar toda clase de calificativos y descalificaciones para la oposición, y para decir que no podrán hacerle nada, porque a él lo apoya el pueblo.
“Se disfrazan de demócratas cuando ellos eran los más tenaces violadores de los derechos del pueblo. Dicen ‘vamos a defender nuestra democracia’. ¿Cuál es la democracia de ellos? Pues la que funciona nada más para parapeto cuando en realidad lo que había era el dominio de una oligarquía corrupta”, dijo el presidente López Obrador.
López Obrador criticó a la oligarquía y apuntó que quieren el gobierno de una minoría, el gobierno de los ricos, el poder sin pueblo. Recordó que es este sector el que busca atacarlo a través de campañas como la de #NarcoPresidenteAMLO, aunque, dijo, está blindado gracias a su “autoridad moral”.
El mandatario federal cuestionó las preocupaciones de las organizaciones y acusó que los líderes de opinión y políticos que convocaron son quienes “promovían y ejecutaban todos los fraudes electorales”, incluyendo el del 2006. De acuerdo con López Obrador lo que se busca con estas movilizaciones es que “regresen los corruptos”.
Sin embargo, tuvo que reconocer que tras esos que marcharon ayer hay millones de personas que están en contra de su gobierno, y aceptó que lo que se vio en las calles de la Ciudad de México durante el domingo 18 de febrero son sólo los líderes de este movimiento.
Añadió que aunque los conservadores pueden ser 15 o 18 millones de personas, no es posible que avancen.
“No veo yo que el bloque conservador en el país, sea la facción que sea, tenga la posibilidad de avanzar; no son pocos, son millones, también eso hay que tenerlo presente”, dijo el mandatario federal.
¿QUIÉN ES EL PUEBLO?
En un tuit dirigido a Claudia Sheinbaum, la politóloga Denise Dresser contestó: “la última vez que chequé la Constitución todos/todas lo somos.
“El pueblo” no solo incluye a quienes apoyan a un partido.
“El pueblo” no solo abarca a quienes creen que la democracia es voluntad de la mayoría.
“El pueblo” también incluye los derechos legítimos de las minorías a oponerse, discrepar, y organizarse contra el gobierno, sobre todo cuando es abusivo/autoritario.
Todos los ciudadanos somos pueblo”.
El periodista Carlos Bravo Regidor también escribió en X: “Pueden estar en desacuerdo con la marcha, asumir que fue intrascendente, pueden tener sus antipatías contra quienes la organizaron o participaron. Se vale, cada quien sus opiniones.
Lo curioso es que sientan esa necesidad de salir a minimizar, a descalificar, incluso a provocar. Eso dice mucho más de ustedes que de la marcha. En fin, cada quien sus mezquindades”.
Pero si alguien contestó a López Obrador, a lo que dijo hoy en la mañanera, fue Lorenzo Córdova en la marcha de ayer.
En ella dijo que el Presidente se ha dedicado a dividir entre ellos y nosotros, ellos los malos y nosotros los buenos.
Y dijo que López Obrador constantemente utiliza la frase de que el pueblo está con él, “¿y qué nosotros no somos pueblo?, nos tacha de ser el enemigos del pueblo”.
“Nosotros también somos pueblo”, dijo Córdova, expresidente del Instituto Nacional Electoral.
Al presunto impulso de fraudes electorales en el pasado.
“Nos pasamos más de 40 años construyendo una escalera para que quien tuviera los votos pudiera acceder al primer piso y hoy, desde el poder, quien llegó a ese primer piso por la libre voluntad de la ciudadanía pretende destruir esa escalera para que nadie más pueda transitarla”, declaró.
En el Zócalo capitalino, ante cientos de miles de asistentes que llenaron la Plaza de la Constitución con motivo de la Marcha por la democracia, Córdova Vianello recordó que hace apenas cuatro décadas en México no había elecciones libres y democráticas: “Eran tiempos de un pensamiento único y de ejercicio autoritario del poder. Había un partido hegemónico y autoritario”.
Por lo anterior, advirtió que hoy “estamos frente a un proyecto de regresión autoritaria. No se trata de especulaciones o de falsas alarmas, ahí están las iniciativas. Se busca desaparecer a los órganos autónomos para que las tareas vuelvan al Ejecutivo tal y como sucedía hace 30 años cuando estaba a cargo de una Presidencia autoritaria”, sentenció Córdova Vianello al mismo tiempo que los asistentes gritaron: “¡Narcopresidente, narcopresidente!”.
El exconsejero aseveró que “no se vale exigir reglas de equidad y condiciones justas en la competencia política siendo oposición y violarlas sistemáticamente siendo gobierno”, y advirtió que lo que actualmente está en riesgo son las condiciones necesarias para votar en libertad, así como las instituciones autónomas.
@emeequis