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El regreso de Médico en tu Casa 

Reconocer logros de administraciones anteriores no debiera pensarse como una debilidad, sino como una visión de Estado: el caso de Médico en tu Casa en CDMX.

3 / 27 / 24

Hasta en Morena reconocen al programa Médico en tu Casa y lo promueven con otro nombre (Salud en tu Casa). Análisis de Julián Andrade.

EMEEQUIS.– Como estamos en época electoral, ahora hasta en Morena reconocen al programa Médico en tu Casa y lo promueven con otro nombre (Salud en tu Casa), pero es básicamente lo mismo que se echó a andar en el gobierno de Miguel Ángel Mancera en la Ciudad de México. 

Es curioso que lo hagan, aunque es loable que así sea, porque desde diciembre de 2018 se dedicaron a boicotearlo. Modificaron la Ley de Salud en 2021 para quitar toda referencia al programa. 

Como advirtieron legisladores de oposición, de lo que se trató es de borrar las huellas de una gestión exitosa, pero no se pudo y por ello es un tema recurrente. 

De alguna forma disfrazaron al Médico en Tu Casa, para que no se notara de donde procedía. Una distorsión que suele ocurrir cuando todo se observa bajo el prisma electoral.

Fue un error, producto de la política caníbal que es tan frecuente en la 4T, porque se desaprovechó el impacto que ya tenía la marca en la sociedad. 

Médico en tu Casa recibió reconocimientos nacionales e internacionales, se firmaron convenios con 12 entidades en el país y con 14 ciudades en el extranjero que, por desgracia, no tuvieron el seguimiento institucional que ameritaban. En ello tuvo un papel destacado el doctor Armando Ahued, entonces secretario de Salud de la CDMX. 

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El modelo era funcional y su rendimiento social compensaba las inversiones que, por lo demás, no eran excesivas y menos tratándose de un tema de salud pública. Para 2017, por ejemplo, el presupuesto para gasto corriente fue de 167 millones de pesos y una inversión de 3 millones más. 

Además, contó con la participación de universidades públicas y privadas que entendieron la utilidad pedagógica de la dinámica de las brigadas y que vislumbraron con tino el compromiso social que ello significaba. 

Uno de los objetivos era justamente el de buscar a la población que podía ser beneficiaria, casa por casa, pero esto tuvo un impacto que significó un mapeo de millones de viviendas lo que propició una mejora en la salud de las familias, con detección temprana de enfermedades y con acciones preventivas.  

Si bien la ley establecía la atención domiciliaria para mujeres embarazadas, adultos mayores, enfermos postrados o terminales y personas con discapacidad, los niveles de impacto aumentaban con la práctica cotidiana y con la relación que los médicos generaban con los pacientes en sus domicilios. 

Esto resultó posible por un modelo de atención que contemplaba el diagnóstico y la atención primaria, de lo que se desprendían las visitas cotidianas a los pacientes que lo requirieran.

Hay que tener en cuenta que Médico en tu Casa se creó en 2014, con el propósito de reducir la muerte materno infantil brindando servicios médicos domiciliarios a las embarazadas y sin control prenatal. Posteriormente la atención se fue aumentado a otros grupos considerados como vulnerables. 

Quizá una de las virtudes centrales del programa consistía en su carácter expansivo, es decir, se trataba de una rutina que podría ir alcanzando mayores niveles de atención como los realizar convenios con el IMSS y el ISSSTE para auxiliar también a sus derechohabientes. 

Lo que ocurrió y ocurre con Médico en tu Casa es un reflejo de lo que aún nos falta por recorrer en cuanto a institucionalidad se refiere.

Los programas adecuados y más los de carácter social deberían subsistir y no estar sujetos a los vaivenes de la política y mucho menos a reflejos más partidistas que técnicos.

Reconocer logros de administraciones anteriores no debiera pensarse como una debilidad, sino como una visión de Estado. 

Es una enseñanza, donde los despropósitos de quienes ahora gobiernan, en materia de Salud, han sido profundos y en algunos casos desastrosos, como la desaparición del Seguro Popular, por dar el ejemplo más vistoso. 

Para Miguel Ángel Macera, en cambio, es la constatación de que los esfuerzos que significó Médico en tu Casa, un proyecto que guio desde su planeación cumplió con diversos objetivos, en cuanto a salud pública, por supuesto, pero también en el ámbito político. 

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@jandradej

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Julián Andrade

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