EMEEQUIS.– Hacinados en cuarteles y expuestos a agresiones en hoteles, se alojan los elementos del Ejército mexicano que cuidan la construcción del Tren Maya en Campeche, una de las obras prioritarias del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Para cuidar que no se detenga la obra, protegerla de posibles sabotajes o atentados, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aumentó el despliegue del personal militar, sin embargo, no cuenta con espacio suficiente para dar alojamiento a los elementos en tránsito en la región del sureste.
La Sedena va a construir el Tramo 7 Bacalar-Escárcega –conocido como Selva Dos– recorrerá 287 kilómetros, y aproximadamente 200 kilómetros en Campeche. Además una empresa construye el Tramo 2 de Escárcega a Calkiní de 235 kilómetros.
Estas obras demandan mayor presencia para la seguridad en la construcción del Tren Maya, y también después en su puesta en operación en diciembre de 2023, por lo que las instalaciones 33/a. Zona Militar en Campeche están y quedarán rebasadas por el número de efectivos.
En el análisis costo-eficiencia se advierte la problemática (documento interno Sedena).
LA ADVERTENCIA
“La causa raíz de la problemática es el incremento de atribuciones y responsabilidades a la SEDENA dentro de la Región del Sureste, los proyectos de infraestructura que se realizan en la zona han generado crecimiento del personal activo y de los derechohabientes (el Tren Maya es la principal obra de infraestructura en Campeche), de las actividades administrativas, operativas y tácticas (…) dando origen a la problemática central de: Saturación de las instalaciones para el alojamiento provisional del personal militar y derechohabientes de la Sedena, desplegados en la Región del Sureste”, reconoce el Ejército en un documento administrativo interno en poder de EMEEQUIS y que revela las carencias de espacios.
Pero el riesgo más grande es que los elementos militares, “el pueblo uniformado” como los llama López Obrador, se encuentran hospedados en hoteles, porque pueden ser blanco y víctimas de agresiones por parte de la delincuencia común y de la delincuencia organizada.
“Actualmente se presenta una demanda de servicios de alojamiento que excede la capacidad de las instalaciones de alojamiento con las que cuenta la Sedena, lo cual genera el desvío de personal militar hacia el alojamiento de la 33/a. Zona Militar en Campeche, Campeche, o a otros centros de alojamiento privado. Teniendo como consecuencia los siguientes efectos: Condiciones de riesgo en su integridad física del personal militar foráneo, derechohabientes y acompañantes, por la exposición con personas que no comulguen con las actividades y misiones encomendadas al instituto armado”, advierte.
Los elementos del Ejército tienen asignada como una de sus misiones el “apoyo de traslado y seguridad a la construcción del Tren Maya en el Estado de Campeche”.
Sedena tiene desplegados mil 672 efectivos militares en Campeche, de ellos 650 soldados asignados a la seguridad del Tren Maya, es decir, el 40% del despliegue.
Se reconoce que existe “saturación en las instalaciones actuales de alojamiento provisional” y que hay “sobrecostos en traslado y alimentación” por el “desvío del personal militar y derechohabientes a establecimientos privados lejanos”.
El Ejército mexicano tiene la obligación de proveer a su personal y derechohabientes, las condiciones y recursos necesarios para su traslado y estancia que le permitan el cumplimiento de actividades, encomiendas y uso de servicios médicos en condiciones de calidad y eficiencia, sin embargo, en Campeche no se cumple esa obligación, son más los efectivos que los sitios de alojamiento disponibles.
“Se tienen condiciones inadecuadas para la pernocta, alimentación y traslado del personal militar foráneo en tránsito en Campeche, lo que representa una reducción de la calidad de vida del personal militar”, admite la Sedena.
GRANDES DISTANCIAS
Los alojamientos de los militares lejos de su asignaciones implica un incremento en el Costo de Operación Vehicular (COV), además de que se pone en riesgo a los elementos por las grandes distancias que tienen que recorrer para cumplir con sus misiones.
El aumento de efectivos militares se repite en Tabasco, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo, donde también construyen los otros 5 tramos del Tren Maya, por lo que las condiciones de los soldados son semejantes a las de los efectivos en Campeche, ya que en en estas cuatro entidades se van a levantar los otros mil 100 kilómetros de vías y estaciones de la megaobra lopezobradorista.
El pueblo uniformado, el soldado, no el mando, no ha sido tratado decorosamente, dignamente en Campeche, y en papeles hay un proyecto de alojamiento, pero primero la Secretaría de Hacienda tendría que desembolsar mil millones de pesos para nuevas instalaciones.
Hasta ahora sólo se tiene un predio en la Reserva de la Biosfera de Calakmul, entre Xpujil y Constitución, por lo que las condiciones de los soldados no cambiarán en el corto plazo, pero deben seguir cuidando el Tren Maya.
@Alatriste_III
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