El gobierno de Sinaloa, endeudado y en medio del escándalo. Foto: José Betanzos / Cuartoscuro.com.
EMEEQUIS.– Entre el 7 y el 20 de mayo de 2024, el gobierno de Sinaloa, encabezado por Rubén Rocha Moya, contrajo una deuda discrecional de 2 mil 925 millones de pesos, a través de cuatro empréstitos firmados con la banca privada. Según documentos en poder de EMEEQUIS, estos créditos, destinados a cubrir insuficiencias de liquidez temporal, fueron registrados en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) como obligaciones de corto plazo, con un plazo máximo de 12 meses para su liquidación, junto con los intereses generados.
El primer empréstito, fechado el 7 de mayo de 2024, fue por un monto de 800 millones de pesos, seguido de otro por 600 millones de pesos el 10 de mayo. Posteriormente, el 14 de mayo se firmó un nuevo crédito por 800 millones de pesos y, finalmente, el 20 de mayo, se adquirió un préstamo de 725 millones de pesos. Estos 2 mil 925 millones de pesos se suman a los 800 millones de pesos que el estado de Sinaloa debe pagar en noviembre de 2024, bajo el mismo esquema de financiamiento a corto plazo.
¿CÓMO ESTÁN LAS FINANZAS DE SINALOA?
La situación financiera de Sinaloa ha estado marcada por una alta dependencia de las transferencias federales, un factor que ha contribuido a mantener un nivel de deuda sostenible, aunque con una posición de liquidez débil. Según el reporte de S&P Global Ratings enviado a la Bolsa Mexicana de Valores en abril de 2024, la entidad mantiene una calificación de “mxA” con perspectiva estable, gracias a políticas financieras prudentes que facilitan resultados fiscales relativamente balanceados.
Sin embargo, la confirmación de esta calificación también incorpora un desempeño presupuestal débil y presiones relacionadas con pagos por pensiones, así como el uso de financiamiento a corto plazo. Además, Sinaloa enfrenta un crecimiento económico moderado, en línea con el promedio nacional, a pesar de la expectativa de nuevas inversiones en el estado.
OTROS ESTADOS TAMBIÉN SE ENDEUDAN
Sinaloa no es la única entidad que ha recurrido a financiamiento de corto plazo para enfrentar insuficiencias de liquidez. Estados como Nuevo León y Jalisco han seguido estrategias similares, aunque con montos y condiciones diferentes. De acuerdo con datos de la SHCP, al cierre de 2023, Nuevo León tenía un endeudamiento total de 72 mil 430 millones de pesos, mientras que Jalisco registraba una deuda de 28 mil 100 millones de pesos. Estos estados, al igual que Sinaloa, han utilizado empréstitos de corto plazo para manejar sus finanzas, aunque con diferentes niveles de riesgo y sostenibilidad.
El estado de Sinaloa enfrenta también otros retos financieros derivados de auditorías realizadas por la pasada administración estatal, que podrían requerir el pago de alrededor de mil 600 millones de pesos. Esta situación está en espera de una resolución por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la cual determinará el curso de acción del gobierno actual.
A estos desafíos se suman escándalos recientes que involucran al gobernador Rubén Rocha Moya, relacionados con la detención de prominentes figuras del narcotráfico y el asesinato de Héctor Melesio Cuén Ojeda, líder del Partido Sinaloense. El gobernador ha sido cuestionado por su presunta cercanía con estos actores y por su manejo de la seguridad en el estado, especialmente después de un secuestro masivo ocurrido en Culiacán en marzo de 2024, en el cual 66 personas fueron privadas de su libertad en una sola noche.
@Sandra_Romandia