EMEEQUIS.– El juicio en Estados Unidos contra Genaro García Luna, el exfuncionario mexicano de más alto perfil que ha llegado a una corte, dejó una serie de referencias a políticos y exmandos de seguridad sobre presunta vinculación con el narcotráfico.
Con el veredicto del jurado que terminó en la sentencia de culpabilidad, la mención de hechos como sobornos y acuerdos con el Cártel de Sinaloa (CDS) para el trasiego de droga, la protección institucional e incluso apoyar la lucha contra organizaciones rivales a la liderada entonces por Joaquín “El Chapo” Guzmán e Ismael Zambada García, “El Mayo”, adquirió valor probatorio y es un precedente ante posibles casos llevados en cortes de Estados Unidos.
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Un antecedente es el juicio contra Joaquín Guzmán en 2018, en la misma corte del distrito este de Brooklyn, en el que, precisamente, se mencionó a Genaro García Luna por estar presuntamente coludido con el CDS, mediante el testimonio de Jesús “El Rey” Zambada, colaborador de la Fiscalía y también citado en el juicio contra el exsecretario de Seguridad Pública en el periodo 2006-2012.
Entre las menciones hay una serie de mandos que fueron subalternos a García Luna, pero también el nombre de políticos, gobernantes y de dos expresidentes de México: Vicente Fox (2000-2006) y Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012), en cuyos sexenios se dieron los hechos de los que se acusa a García Luna.
NARRATIVA DE COMPLICIDADES
Durante el juicio del “Chapo” Guzmán, en Nueva York, “El Rey” Zambada, hermano del “Mayo” y un exmiembro del Cártel de Sinaloa, dijo que entregó a Genaro García Luna en un restaurante dos maletas con 5 millones de dólares.
El exfuncionario, antes denominado por medios de comunicación como el “superpolicía” de la “guerra contra el narcotráfico”, respondió a través de una carta pública que esas declaraciones –que ahora, junto con más testimoniales, adquirieron valor probatorio– eran falsas.
“Es mentira, difamación y perjurio a mi persona, que cualquier individuo, policía o grupo delictivo, me haya entregado algún bien económico o material en cualquier momento de mi desempeño público o privado (sic)”, expresó.
“El Rey” Zambada y los sobornos. Foto: Cuartoscuro.com.
La cita no fue aislada: “El Chapo” fue sentenciado y él, posteriormente, llevado a juicio.
Tras su sentencia, las referencias a terceros son parte de un precedente debido a que, para el jurado, se acreditó la complicidad con el CDS a cambio de sobornos con los cuales García Luna se enriqueció, lo cual se vio materializado con el incremento de su patrimonio, improbable de conseguir con los recursos obtenidos por sus cargos públicos, según la hipótesis inicial de la parte acusadora.
En esa validación de los hechos, que coinciden en una línea narrativa espacial y temporal formada por las declaraciones de testigos, están los terceros involucrados, los posibles aliados o cómplices del exsecretario de Seguridad.
Cárdenas Palomino. Foto: Cuartoscuro.com.
¿QUÉ DIJERON LOS TESTIGOS SOBRE TERCEROS IMPLICADOS?
Édgar Veytia, exfiscal general de Nayarit, narró que en 2011, su jefe, el gobernador Roberto Sandoval Castañeda, le indicó que tras una reunión privada había recibido una orden del entonces presidente Felipe Calderón y de García Luna: apoyar a la facción de Sinaloa a cargo del “Chapo” Guzmán en la guerra que éste tenía contra los hermanos Beltrán Leyva.
Sandoval, detenido en junio de 2021 en Nuevo León y preso en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) El Rincón de Nayarit por posible ejercicio indebido de funciones, peculado y delitos electorales, también fue señalado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos de tener vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
“Funcionarios como Roberto Sandoval Castañeda […] se enriquecen cruelmente a expensas de sus conciudadanos, ya sea que estén recibiendo sobornos de organizaciones de narcotráfico o participando en una variedad de otras actividades ilícitas, estos y otros funcionarios corruptos se enfrentarían a graves consecuencias, incluido el aislamiento del sistema financiero de los Estados Unidos”, expuso el gobierno norteamericano, que congeló los activos del político nayarita, a quien liga con Los Cuinis, operadores de lavado de dinero del Cártel Jalisco.
En el relato de segunda mano de Veytia, porque se trata de sucesos que no atestiguó, el subalterno de Sandoval afirmó que la orden fue que “protegiera a la gente del Chapo, no a la de Beltrán Leyva”, además de decir que esto ocurrió después de que su jefe se reunió con Calderón y García Luna.
Tras las alusiones, el expresidente negó que ese suceso hubiera ocurrido:
“Niego categóricamente las absurdas declaraciones que reporta la prensa que hizo hoy el testigo Veytia. Lo que señala sobre mí es una absoluta mentira. Nunca negocié ni pacté con criminales”, replicó Calderón a través de Twitter; tras la sentencia a su excolaborador García Luna no tuvo pronunciamiento.
Édgar Veytia: Foto: Especial.
El mismo deslinde hizo Roberto Sandoval, quien argumentó que “después de cinco años de investigación profunda, la Fiscalía General de la República, basada en el análisis de la función pública, determinó que en mi caso no hay indicios de enriquecimiento ilícito ni de peculado (…) “Como la gente lo sabe, estoy detenido y en proceso por temas administrativos como el del Programa Alimentario PROSA”, argumentó, para desligar que, al menos en México, se le indague por posible asociación con el crimen organizado.
No obstante, Veytia declaró en la corte que la campaña de Sandoval fue financiada por el narcotráfico, y que recibían sobornos de Los Beltrán Leyva a cambio de no inmiscuirse en sus asuntos, sino protegerlos.
En el contrainterrogatorio, el exfiscal mencionó que, con la intención de disminuir su sentencia a 20 años de prisión por narcotráfico que en 2009 recibió en la misma corte, proporcionó a las autoridades estadounidenses información sobre otros exfuncionarios posiblemente ligados al crimen organizados, entre ellos hizo mención del “secretario de la Defensa Nacional”, en posible alusión a Salvador Cienfuegos Zepeda.
El general fue arrestado en Los Ángeles a finales de 2020 por cargos de soborno y narcotráfico; no obstante, por presiones del actual gobierno mexicano, que advirtió un posible conflicto diplomático, fue enviado al país, donde la Fiscalía General de la República (FGR) resolvió: “con base en los razonamientos y pruebas en la carpeta correspondiente –que son una serie de conversaciones entre presuntos miembros de la delincuencia organizada interceptadas por la DEA– (…) ha determinado el no ejercicio de la acción penal, en favor del general Salvador Cienfuegos Zepeda”.
En esa serie de mensajes se mencionan a políticos durante el mandato de Enrique Peña Nieto, y la exprocuradora Arely Gómez.
Las presuntas conversaciones son entre Juan Francisco Patrón Sánchez, conocido como el “H2”, y Daniel Isaac Silva Gárate, identificado como el “H9”, líderes del Cártel de Los Beltrán Leyva.
Si bien México exoneró al secretario de la Defensa en el periodo de Peña Nieto, Estados Unidos no lo consideró inocente de las acusaciones que le hizo sobre lavado de dinero y narcotráfico, sino que lo envió al país vecino con la intención de que fuera sometido a juicio.
“El Grande” destapó la cloaca. Foto: Cuartoscuro.com.
La alusión a Felipe Calderón no es la primera a un presidente de México por posible protección a cárteles de la droga. En el juicio contra “El Chapo”, Alex Cifuentes, narcotraficante colombiano y exsocio de Guzmán Loera, dijo que el expresidente Enrique Peña Nieto recibió un soborno de 100 millones de dólares de parte del líder del Cártel de Sinaloa.
La afirmación surgió por pregunta directa de un abogado de “El Chapo”: “¿Guzmán pagó un soborno de $100 millones de dólares al presidente Peña Nieto?”, preguntó Jeffrey Lichtman, que encabezó la defensa.
“Así es2, contestó Cifuentes, aunque matizó que esto lo sabía porque se lo contó el capo sinaloense, sin haberlo atestiguado directamente. Añadió que Peña Nieto había solicitado un total de 250 millones de dólares, según lo que a él le había mencionado el “Chapo”.
EL GRUPO GARCÍA LUNA
Los testigos en el juicio contra García Luna también mencionaron a un grupo de subalternos de Genaro García Luna, que durante los sexenios de Vicente Fox y Felipe Calderón (2000-2012) gozaron del control operativo y presupuestal de la Seguridad Pública, y cuya influencia se extendió al gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018).
Entre los principales están Luis Cárdenas Palomino y Ramón Eduardo Pequeño García, igualmente indagados por EU.
A Cárdenas Palomino, que ocupó cargos como titular de la Agencia Federal de Investigación (AFI) y de la División de Seguridad Regional de la Policía Federal, el narcotraficante Óscar Nava Valencia, alias “El Lobo” , lo acusó de recibir un adelanto de 500 mil dólares en 2018 para que pactara una reunión con su jefe. El propio “Lobo” supuestamente entregó el dinero y la reunión con García Luna pactada por Cárdenas Palomino se habría llevado a cabo en las oficinas de un centro de lavado de autos en Guadalajara.
En ese encuentro, aseguró Nava Valencia, entregó al exsecretario de Seguridad Pública otros 2 millones y medio de dólares. En total, este exlíder criminal aseguró haber dado 10 millones de dólares
Cárdenas Palomino fue aprehendido el 5 de julio de 2021, por una orden girada en su contra por su presunta responsabilidad en el delito de tortura, en modalidad de instigador y autor material, en el marco de la detención de Mario Vallarta Cisneros, hermano de Israel Vallarta.
Uno de los testigos que más referencias hizo a la supuesta estructura de gobierno a través de la cual el exsecretario de Seguridad Pública conspiró para el tráfico de cocaína y protegió al Cártel de Sinaloa fue Sergio Villarreal Barragán, “El Grande”, el primero en ser citado.
“La Barbie”, otro implicado. Foto: Cuartoscuro.com.
A él, la fiscalía mostró lo que para ellos era el organigrama del grupo García Luna. Ahí, ante el juez Brian Cogan –mismo que sentenció al “Chapo”– mostró la fotografía del excomisionado de la Policía Federal, Víctor Gerardo Garay Cadena, contra quien se iniciaron procesos en México por narcotráfico, pero fue exonerado en 2012. Cuando se la señalaron, “El Grande” lo llamó corrupto.
Villarreal Barragán, con esa radiografía como muestra, se refirió a otros exfuncionarios: “Espinoza de Benito trabajaba para ‘El Mayo’ y ‘El Chapo’ y Gómez Meza era director regional de la AFI y parte de su trabajo para el Cártel de Sinaloa era el de poner y quitar comandantes en toda la república sobre todo para los Beltrán Leyva”,
Francisco Javier Gómez Meza fue nombrado por García Luna director de la cárcel de máxima seguridad Puente Grande y también fue detenido y acusado por la Procuraduría General de la República (hoy FGR) de recibir sobornos del narcotráfico, mientras que Armando Espinosa de Benito fue jefe de la División de Investigaciones de la Policía Federal y, en 2012 fue acusado por Édgar Valdez Villarreal, “La Barbie”, de estar coludido con el crimen organizado, en una carta pública.
Otros miembros del grupo García Luna referidos en el juicio por el primer testigo, “El Grande”, fueron Francisco Gómez Meza y Roberto Sánchez Alpízar, exfuncionarios de la AFI, así como Noé Ramírez, Miguel Colorado y Jorge Alberto Zavala, que fueron parte de la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), desde donde, presuntamente, operaban en favor de los intereses de la organización de Sinaloa.
La carta de Calderón surgió hasta después de las 9 de la noche.
LOS EXPRESIDENTES
Se tardaron unas horas en reaccionar al fallo pero, finalmente, Vicente Fox (2000-2006) y Felipe Calderón (2006-2012), los expresidentes a cargo en el periodo durante el cual sucedieron los hechos de que se acusa a Genaro García Luna, reaccionaron a su veredicto de culpable.
“Sigue Calderón, dice Morena tras fallo contra García Luna. EL QUE SIGUE ES LOPEZ, PRIMERO FUERA DE PALACIO Y LUEGO DENTRO DE LA CARCEL!!”, expresó Fox a las 7:22 del martes en su cuenta de Twitter.
“La decisión está siendo ya usada políticamente para atacarme”, señaló Calderón a las 9:12 de la noche, por la misma vía. “He sido el presidente que más ha actuado en contra de la delincuencia organizada”, apuntó, en una carta de dos páginas, en la que también aseguró: “Como presidente de México luché con toda determinación en contra la delincuencia, con la ley en la mano, sin dar tregua ni hacer distinción entre grupos. Jamás negocié ni pacté con criminales”.
@axelchl
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