EMEEQUIS.– Pese a los avances considerables en materia de aborto en México, en los últimos ocho meses se han abierto 534 carpetas de investigación por el delito de aborto en el país y de estas, casi el 39% de las carpetas corresponde a los estados donde ya hubo un avance en materia legal.
Especialistas y activistas consultadas por EMEEQUIS coinciden en este 28 de septiembre, Día de Acción Global por un aborto legal y seguro en América Latina, que es de celebrarse que en los últimos 14 años, suman ya 10 entidades mexicanas donde los congresos locales han modificado sus leyes y la Suprema Corte de Justicia emitió una sentencia histórica para un estado y aplicable para todo el país. Pero aún existen muchos retos pendientes.
EL DELITO DE ABORTAR
La definición del artículo 329 del Código Penal Federal del aborto como “la muerte del producto de la concepción en cualquier momento de la preñez” advierte que toda mujer, hombre trans o persona no binaria embarazada, así como personal de salud y acompañantes de un aborto pueden ser privados de su libertad y enjuiciados por este delito.
El delito y definición del aborto se replica en 22 de los 32 códigos penales estatales, mientras que en ocho estados existe una despenalización hasta las 12 semanas de gestación, en un estado hasta las 13 semanas y en otro está despenalizado en su totalidad.
No obstante, la criminalización por el delito de aborto permanece incluso en los estados que lo han despenalizado.
En una revisión a los reportes de incidencia delictiva realizados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de 2019 (año en que la Marea Verde retomó fuerza en México con la despenalización del aborto) hasta agosto de 2022, se revela que la apertura de carpetas de investigación continúa en la Ciudad de México, Oaxaca, Hidalgo, Veracruz, Coahuila, Baja California, Colima, Sinaloa, Guerrero y Baja California Sur.
Cifrsas de aborto y carpetas de investigación.
Ninde Molina, abogada especialista en derechos sexuales y reproductivos y miembro de AbortistasMx, explica a EMEEQUIS que existen dos tipos de despenalización: total y parcial. En México, desde 2007, con la despenalización del aborto en la capital, se trata de una despenalización parcial, por lo que el delito no desaparece de los códigos penales totalmente.
Sin embargo, agrega que la Suprema Corte de Justicia de la Nación dejó claro, en septiembre del año pasado, que el aborto es un derecho vinculado a la salud sexual y reproductiva así como al derecho a decidir que las personas tienen sobre su autonomía y libertad.
“Otra cosa, que creo que se nos olvida también es que el aborto es un hecho en la vida reproductiva de las mujeres y las personas con capacidad con gestar. El aborto pasa. Más bien, han sido el derecho y la sociedad quienes están en la eterna disputa entre si el aborto es un crimen o un derecho.
Veronica Esparza, coordinadora de investigación del Grupo de Información en Reproducción Elegida (Gire), una organización feminista y de derechos humanos que trabaja en favor de los derechos reproductivos, hace varias observaciones sobre las cifras del Secretariado Ejecutivo:
- Las cifras del Secretariado no están desagregadas. Es decir, no hay una especificación por sexo, lo cual impide saber si estas carpetas por aborto son carpetas iniciadas para denunciar a las mujeres o personas con capacidad de gestar que decidieron interrumpir su embarazo o a las personas que participaron o ayudaron a abortar como podría ser el personal de salud (médicos, enfermeros, trabajadores sociales) o acompañantes y activistas.
- El Secretariado Ejecutivo no informa cuántas de estas carpetas de investigación derivan en una acción penal. O sea, cuántas de estas denuncias terminan con un proceso en la cárcel, una multa o se desecha el caso.
- No se puede saber cuántas de estas carpetas de investigación podrían estar involucradas con un delito relacionado con violencia de género. A los hombres y personas que violentan a una mujer embarazada y pierde al bebé, o en el caso de feminicidas de mujeres embarazadas, se les investiga también por aborto forzado.
UN MEJOR SERVICIO DE SALUD, EL RETO
En el caso de la prestación de servicios de salud para realizar el procedimiento de aborto, Verónica insiste en que mediante la despenalización total, legal y social del aborto podrá garantizarse un cambio donde el aborto sea concebido como un servicio de salud más.
Y es que, a pesar de la despenalización parcial en estos estados, Ninde subraya que diversos miembros del personal de salud de áreas que van más allá de quien atiende a la mujer o persona que decidió abortar, como psicología, enfermería, personal de rotación, residentes, trabajo social, entre otros, ejerce funciones que trascienden lo que les toca.
“Al personal de salud no le corresponde investigar, si en algún momento quisieran denunciar algo tendrían que ser las señales, decir si llegó con un sangrado inusual, más no extralimitarse y culpar”.
Además, señala que en los estados que han despenalizado parcialmente, existen hospitales e instituciones de salud pública que continúan negándose a dar el servicio.
Por ello, ambas especialistas coinciden en que sacar el delito de aborto del Código Penal ayudaría a ir eliminando estigmas y el pretexto de no atender en instituciones públicas.
Imágenes de la marcha en CDMX. Fotos: Frida Mendoza.
FUERA ESTIGMAS
Uno de los principales estigmas que señala Ninde es el que hay en contra del aborto en casa.
“En América Latina y principalmente en México tenemos redes muy grandes de acompañamiento de mujeres que hemos abortado en casa”, y recuerda que la Organización Mundial de la Salud cuenta con un manual de aborto seguro con medicamentos.
“La agenda es larga porque tenemos que seguir luchando por la despenalización, y hasta que no logremos sacarlo de todo el país, de todos los códigos penales no habremos terminado. Y ni así, esto no termina hasta que realmente lo podamos vivir como un derecho y que el Estado brinde estos servicios de forma gratuita y universal”.
@FridaMendoza_
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