EMEEQUIS. Ernestina Godoy tiene fecha límite en el cargo de fiscal de la Ciudad de México. El 9 de enero dejará su oficina si no es ratificada por el Congreso local.
Luce complicado el escenario, porque requiere 44 de los 66 legisladores para que se le ratifique. Si la oposición permanece unida no hay modo de alcance el número necesario de adhesiones.
En otras circunstancias, en Morena y en el Palacio del Ayuntamiento ya deberían estar buscando otros perfiles, pero ello requerirá de voluntad para buscar una designación que no desate tempestades.
No lo harán, por ahora, porque están empecinados en que sea Godoy. Martí Batres ha dicho que los diputados que se manifiesten en contra de la continuidad, terminarán pagando un alto costo. El jefe de Gobierno se refería a las cuentas políticas que en este caso se tendrán que hacer, pero sonó a una amenaza que en nada ayuda a buscar algún punto para intentar un acuerdo.
Godoy está haciendo de su ratificación una suerte de referéndum en el que la disyuntiva es ella o la corrupción. Un absurdo, pero atado a la campaña desplegada por la propia Fiscalía argumentando que existe un cártel inmobiliario y que está ligado al PAN.
Hay procesos abiertos, y el exdelegado de Benito Juárez, Christian von Roehrich, se encuentra en prisión, pero no existe, de modo público al menos, una evidencia que envuelva a otros liderazgos, aunque siempre se amague con ello.
Lo que sí hay, en contrapartida, es datos puntuales sobre espionaje, por demás ilegal, en contra de Santiago Taboada, el abanderado de Va X la CDMX y muy serio aspirante para convertirse en el próximo jefe de Gobierno.
Es más, hay motivos fundados para sospechar que estamos ante una operación que tiene como objetivo el intentar desplazar, a la mala, a políticos que son un riesgo para que Morena retenga la capital del país.
Pero existe un asunto que se soslaya, y son los requisitos que deben existir para quien encabece la institución encargada de procurar justicia.
La búsqueda de mayorías calificadas se sustenta por la necesidad de que los fiscales cuenten con la legitimidad y el apoyo suficiente para hacer un trabajo que es de la mayor importancia.
Los fiscales no tienen que ser moneditas de oro, pero tampoco factores que dividan y generen problemas de índole política que, por necesidad, impactarán de forma nada favorable en su trabajo.
La propia fiscal Godoy debería de dar el paso a un costado, para abrir la puerta a un relevo que pueda construir una relación adecuada con la oposición y con las organizaciones de la sociedad civil.
Sí, el trabajo es técnico y autónomo, pero no puede desarrollarse desde el conflicto, o no debiera ser así, sobre todo en el entendido de que lo que se busca es abatir la impunidad y proceder contra quien se deba hacerlo.
Lo más probable, sin embargo, es que en Morena todavía busquen alguna treta para intentar convencer a diputados por la vía del ofrecimiento de cargos y recursos, o por la vía de la activación de expedientes penales, una variable bastante socorrida últimamente.
Lo que estamos atestiguando es inédito, porque nunca había ocurrido que la decisión política de mantener un fiscal fuera en simetría a las objeciones para que ello ocurra.
Hasta hace unos años, una situación semejante no sería posible, por múltiples motivos y, entre ellos, porque sí importaba lo que tuvieran que decir otras fuerzas políticas.
En el fondo, la insistencia en la ratificación de Godoy es la muestra de un gobierno que necesita imponer, porque no sabe negociar y no comprende que la Ciudad de México es plural y que ello proviene, precisamente, del voto ciudadano, que fue el que determinó la composición de la actual legislatura.
LAS VÍSPERAS DEL 2024
De acuerdo con el Sistema Integral de Fiscalización del INE, Claudia Sheinbaum ha gastado 13.4 millones de pesos en su precampaña, frente a un desembolso de 23.2 millones que ha ejercido Xóchitl Gálvez. Lo interesante, y que tiene que ver con la estrategia, es que en Morena están privilegiando el trabajo territorial y en el equipo de campaña de Fuerza y Corazón por México el de impacto en redes sociales e internet. Dos visiones, aunque la exjefa de gobierno tiene a su servicio la propaganda que día a día se emite desde Palacio Nacional, con todo lo que ello implica.
@jandradej
Powered by Froala Editor