El líder de Morena ya dio la instrucción de mostrar en carteles los rostros y los nombres de los que considera “traidores a la patria”, por votar contra la Reforma Eléctrica, con lo que pone en riesgo la integridad de legisladores. Es guerra sucia.
EMEEQUIS.– Nadie puede negar que Mario Delgado tiene tatuado el estilo de la 4T y en particular aquello de nunca reconocer una derrota. Como no pudo operar de modo eficiente para lograr una mayoría legislativa de respaldo a la iniciativa de Reforma Eléctrica del presidente López Obrador, ahora se dedicará a denostar a los 223 diputados que votaron en contra de ella.
El líder de Morena ya dio la instrucción de mostrar en carteles los rostros y los nombres de los “traidores a la patria”. Es una cacería de brujas en toda regla y que es respaldada por la senadora Citlalli Hernández, la que tampoco se caracteriza por su capacidad de diálogo o de tolerancia con los que piensan distinto a ella.
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Es una acción por demás cuestionable, ya que pondrá en riesgo a los legisladores aludidos y es guerra sucia. Queda claro que Delgado y Hernández son muy malos perdedores.
LAS LISTAS DE ACKERMAN
Pero donde ya andan haciendo otro tipo de listas es en los sectores más radicales de Morena. Resulta que están culpando a Mario Delgado de lo ocurrido el domingo en San Lázaro, donde faltaron 57 votos para que se aprobara la Reforma Eléctrica. De acuerdo con John Ackerman el responsable es Delgado, ya que como líder de los morenistas presentó candidaturas impresentables que no rindieron en las urnas.
En Morena viene ya un ajuste de cuentas que preparará el escenario para el 2024.
Los que conocen a las tribus del partido en el poder, dicen que los tambores de guerra ya se escuchan y que no dejarán de sonar hasta nuevo aviso.
MONREAL, A PREDICAR EN EL DESIERTO
El senador Ricardo Monreal por momentos parece un predicador en el desierto. Hábil, como es, ya se dio cuenta del problemón que se le vendrá encima si no se articula un diálogo constructivo con la oposición.
En los hechos, el PAN, PRI y PRD pueden paralizar el trabajo legislativo si se lo proponen, e impedir las designaciones en diversos organismos autónomos.
A estas alturas es evidente que en Palacio Nacional no quieren ni tocar el tema y que el secretario de Gobernación, Adán López Hernández, se descartó como interlocutor de los partidos cuando arengó contra ellos haciendo franca campaña por la Revocación de Mandato.
Por eso queda Monreal, ya que tienen contacto con todas las fuerzas políticas, pero ello es un arma de doble filo, ya que nadie le agradecerá sus gestiones, pero más de uno le reclamará cuando las cosas de plano no avancen.
EL LITIO Y SUS MOLINOS DE VIENTO
Se llama control de daños. El presidente López Obrador es experto en manejar los tiempos de la agenda pública y por ello empujó la aprobación inmediata de una reforma en la Ley Minera para que el litio sea reconocido como patrimonio de la nación, estableciendo que su exploración, explotación y aprovechamiento estarán exclusivamente a cargo del Estado.
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Es una suerte de pelea con molinos de viento, porque el litio siempre ha sido propiedad de los mexicanos, porque así lo estipula el artículo 27 de la Constitución.
El gobierno cuenta con la capacidad legal de decidir a quién entrega una concesión minera y quién no, pero la idea es mostrar músculo después de la votación del domingo.
En Palacio Nacional saben que aprobar una ley reglamentaria es endeble, porque una mayoría distinta la puede echar para abajo en el futuro, pero el objetivo es propagandístico, para tratar de equipararse, sin proporción alguna, con Lázaro Cárdenas y el petróleo, o con Adolfo López Mateos y la electricidad.
Lo que sí es grave, es que el encargado de la empresa estatal será nada menos que Manuel Bartlett, con lo que por lo menos se puede adelantar que en el tema no se avanzará nada en el último tramo de esta administración.
@emeequis
Samuel García desobedece a la Corte y “regresa” como gobernador, pese a que ya existe un interino nombrado por el Congreso y avalado por el Máximo Tribunal. Ayer se venció el plazo de 6 meses para dejar el cargo si quiere ser candidato presidencial.
La Comisión de Quejas y Denuncias aprobó medidas cautelares contra Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López, Ricardo Monreal, Manuel Velasco y Gerardo Fernández Noroña, quienes deberán evitar actos anticipados de campaña, llamados explícitos al voto, declarar a favor o en contra de partidos, promoverse por un cargo o usar tiempos oficiales de radio y televisión, mientras Morena tendrá que informar de las finanzas
