EMEEQUIS.– Los tamaños y posturas públicas de los grupos parlamentarios prefiguran, de no presentarse un milagro, la derrota inminente de la Reforma Eléctrica obradorista en la Cámara de Diputados. Su votación, a verificarse mañana, podría replantear el tablero político nacional.
Para el sector oficial podría tratarse del fin de su dominio de la agenda. Para los opositores, un relanzamiento. Para el presidente, el principio del fin de su sexenio.
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La ubicación inicial y final de los personajes que han protagonizado la lucha por imponer dos visiones encontradas, da una noción sobre cuánto podría cambiar el tablero. En la 4T ya incluso asumen la derrota y el presidente anticipó que este lunes enviaría iniciativa de reforma a la Ley Minera para proteger el litio.
BLOQUE OFICIAL: AMLO, LA ÚLTIMA BATALLA CONSTITUCIONAL
La iniciativa de Reforma Energética que se votará mañana en San Lázaro podría ser la última batalla parlamentaria del gobierno de Andrés Manuel López Obrador con alcances constitucionales.
Desde las elecciones intermedias de 2021, cuando su bloque perdió la mayoría constitucional, el tabasqueño mostró su confianza en que podría rearmar un dominio al servicio de su proyecto sumando al PRI.
AMLO vs Iberdrola.
Incluso ejerció en días recientes ejerció de cabildero mayor, lisonjeando a los tricolores, pero estos no cedieron, aunque parecían los más vulnerables a los cortejos de Palacio. Sólo lograron sumar al diputado Miguel Aysa Damas.
La alternativa que le queda a López Obrador es darle la vuelta a la Constitución a través de legislaciones secundarias y validarlas después como constitucionales, como ocurrió con la Ley de la Industria Eléctrica, en la Suprema Corte de Justica de la Nación (SCJN), donde tiene a sus fieles ministros Arturo Zaldívar y Loretta Ortiz.
BARTLETT, CAPRICHO PATRIOTERO
Manuel Bartlett, director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) es uno de los principales interesados en la reforma. La ha revestido de un discurso de patriotismo, por la presunta defensa de la “soberanía” energética.
La batalla personal de Bartlett.
En realidad, la reforma constituye su venganza contra los “neoliberales salinistas” que aprobaron los cambios constitucionales que posibilitaron las concesiones de generación para particulares. Él era entonces senador por el PT, y odiaba a los cabilderos que llegaban “con sus presentaciones de power point” a promover aquella iniciativa. Sobre todo aborrecía que le hablaran sin respeto, según ha dicho.
Sin embargo, al parecer, la venganza quedará trunca. Los números no dan. Quizá el director de CFE no llegue a verla.
ADÁN AUGUSTO: CABILDERO DE MANO DURA
El secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, coordinó el despliegue de cabilderos obradoristas para ganar legisladores opositores a su causa, pero con la enjundia propia de su papel de informal jerarca partidista de Morena.
Su estilo de lobbying ha sido francamente rudo. No sólo ha sido la oferta de cañonazos, puestos de gobierno, contratos. También ha habido presiones extralegales, propiamente amenazas.
Adán Augusto y la mano dura.
El diputado panista Jorge Triana denunció que tras las ofertas rechazadas, vienen las amenazas: “El gobierno ha salido de ‘shopping’ cínicamente, se encuentran al acecho de las voluntades más frágiles e intentan a toda costa llevar votos a su causa, con dinero puestos o amenazas (…). Han enviado ‘cabilderos’ que ofertan su catálogo de chantajes. (…) Sus tiradores digitales amenazan hasta con la muerte a algunos legisladores o bien con la tentativa de agredir a familiares”.
“GUTIERRITOS”, TODO POR LA CANDIDATURA VERACRUZANA
El que ha encontrado en la discusión de la reforma su hora estelar, es el veracruzano Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Mesa Directiva, a quien la diputada panista María Elena Pérez-Jaén se refiere cariñosamente como “el diputado Gutierritos”.
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Incluso ha desplazado, si no es que opacado, al coordinador morenista Ignacio Mier Velazco. Ambos se disputaron la capitanía del bloque obradorista en la gestión y promoción de la reforma energética.
Enjundia de “Gutierritos”.
Pero fue Gutiérrez Luna quien desplazó a Mier. Su enjundia encendida contra los opositores a la iniciativa presidencial alcanzó registros de estridencia. Como fue difundido en su momento por EMEEQUIS, Gutiérrez presumió que había acaparado la interlocución del bloque oficial con la oficina principal del palacio presidencial. Y que gracias a ese trabajo político tenía amarrada “ya” la candidatura morenista al gobierno de Veracruz para 2024.
Pero habrá qué esperar de qué humor aparece el lunes AMLO en su presentación mañanera, y ya se sabrá cómo queda cada uno de los miembros del amplio equipo de alfiles obradoristas.
NOROÑA: DESDE LA CURUL DE TEPOZTLÁN
El petista Gerardo Fernández Noroña, llamado “Changoleón” por sus compañeros de legislatura, es otra de las estrellas que fulguró en el firmamento obradorista con la promoción de la reforma eléctrica.
Su papel fue sencillo pero indispensable: dotó del quórum necesario a la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados para que los altos jerarcas obradoristas desplegaran su voluntad. Incluso lo hizo por teleconferencia, desde su refugio proletario de Tepoztlán, donde rentó una casa de veraneo.
Noroña: opera desde Tepoztlán.
A cambio, sus camaradas de la Jucopo, comenzando por los mismos obradoristas, tenían que recetarse los engolados sermones parlamentarios noroñeros, siempre ahítos de giros churriguerescos, ayunos con frecuencia de sustancia, y amplios como la eternidad.
OPOSITORES: ALITO, LIDERAZGO A PRUEBA
El diputado y líder priísta Alejandro Moreno Cárdenas, “Alito”, sí que sufrió en serio con los embates del obradorismo a su bancada tricolor, donde mucho le costó mantener la cohesión.
Moreno: hasta el momento sólo se le ha escapado un voto.
A pesar de los pronósticos, sólo perdió uno de sus miembros ante la ofensiva de agasajos y amenazas del grupo en el poder: el diputado Miguel Aysa Damas, rebautizado casi de inmediato por sus correligionarios como “el Iscariote” Aysa.
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Con todo, Alito parece haber pasado la prueba. Pero no puede decirse que es prueba superada hasta que los votos priístas aparezcan en el tablero electrónico de la Cámara de Diputados.
MARKO CORTÉS, EN EL LÍMITE DE LO SUFICIENTE
La postura del presidente del PAN, Marko Cortés Mendoza, frente a la reforma energética obradorista, ha sido de permanente rechazo. Desde un principio anunció que la bancada de su partido iba en contra y no hubo sombra de disidencia.
Su coordinador parlamentario en San Lázaro, Jorge Romero, mantuvo esa cohesión al interior del grupo albiazul, sin asomo de fisura. El activismo de los diputados –y senadores– en redes sociales completó esa imagen de unidad.
Cortés… ¿esta vez no está difícil?
Con todo, los dirigentes blanquiazules de la hora parecen palidecer ante la solvencia discursiva y capacidad de liderazgo de sus antecesores de hace décadas.
Tal vez la previsible derrota a la reforma energética obradorista “electrice” al fin a las figuras panistas. Acaso así se olvide el penoso episodio en el que el dirigente Cortés dijo a sus huestes hidrocálidas que estaba “muy difícil” ganar gubernaturas.
ZAMBRANO: SALVANDO LA FRANQUICIA
Jesús Zambrano, dirigente del PRD, tuvo también una oportunidad única para placear la franquicia del sol azteca, tan galga que viene a últimas fechas. Se puso al tú por tú con AMLO y le reviró que quienes voten contra la reforma no son traidores, sino al contrario.
Anunció desde marzo que sus 14 diputados irían contra dicha iniciativa. Aunque parezca poco, en estas horas cruciales el voto de este grupo puede ser definitorio.
Zambrano: pocos pero cruciales.
La habilidad de Zambrano consiste, no en los desafíos que plantea, sino en el milagro de mantener viva una franquicia política que bien pudo desaparecer, como, de hecho, lo hizo en algunas regiones.
MOREIRA: CONCERTACESIONES
Al diputado priísta Rubén Moreira también se le enrareció el clima político con el tortuoso proceso legislativo surcado por la Ley Bartlett.
Se le acusaba desde hace tiempo de tener un acercamiento más que institucional con Bucareli, y quizá fue debido a ese antecedente que el fin de semana pasado, cuando los obradoristas reunieron de manera extraordinaria a la Jucopo, que el legislador coahuilense recibió una nutrida tanda de reproches.
Las dudas sobre Moreira.
Le reclamaban, precisamente, haber “facilitado” un “quórum artificial” a los obradoristas para reunir a la Jucopo. En efecto, habría bastado su declinación para imposibilitarla. La presión pública, no obstante, bastó para alejar a Moreira de esos territorios, pero queda la duda sobre sus gestiones intramuros con el sector oficial.
DANTE, FORTALECIENDO LA FRANQUICIA NARANJA
El líder moral de Movimiento Ciudadano (MC), Dante Delgado, impulsó en su bancada naranja de San Lázaro, que coordina Jorge Álvarez Máynez, un rechazo tajante a la reforma obradorista.
Su partido denunció además a los aliancistas –PAN,PRI, PRD– por ceder a negociaciones con el obradorismo, a sabiendas de que los propósitos no era ser incluyentes, sino legitimar su propuesta con la supuesta inclusión de propuestas opositoras.
Dante: rechazo tajante.
Al parecer los jerarcas de la franquicia naranja siguen empeñados en diferenciarse del resto de los partidos opositores, confiados aquellos, quizá, en que ganaran solos la presidencia en 2024.
El episodio está por concluir, este domingo, con la votación, al fin, de la reforma eléctrica, un evento que podría reorganizar el tablero político nacional.
@emeequis