EMEEQUIS.– Después de la tragedia del pasado 10 de julio en un elevador del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Quintana Roo, en el que perdió la vida una niña, el gobierno de México iniciará un programa de sustitución de 59 elevadores defectuosos, sin embargo… comenzará en el año 2024.
El Seguro Social reconoce que la sustitución de elevadores se realiza por los altos costos de mantenimiento, precisamente lo que falló en esa ocasión, de acuerdo con el propio instituto, que culpó a la empresa encargada de brindarlo, pero sobre todo por los “costos en la imagen institucional”, revela el proyecto en poder de EMEEQUIS.
“Las unidades que contarán con la sustitución de equipos de transportación vertical son unidades que cuentan con equipos deficientes que a lo largo del tiempo han generado costos significativos de operación y sobre todo costos en la imagen institucional, por lo que es necesario se cuente con la adquisición que permita la operación óptima de los servicios médicos o bien aquellas unidades que permiten la operación de diversos servicios paralelos a los médicos”, reconoce el Seguro Social.
El programa consiste sólo en la sustitución de 59 elevadores eléctricos para las diversas unidades del Instituto y se solicitó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público 281.5 millones de pesos para ejercerlos el próximo año.
El pasado 27 de julio, se volvieron virales las imágenes de ocho personas atrapadas en el Hospital General Regional (HGR) 46 en Guadalajara, Jalisco, por lo que se tuvo que abrir el techo de plafón para forzar las puertas y que las personas pudieran salir, reconoció la dependencia. Precisamente esa clínica está incluida en la lista de 59 elevadores a cambiar en este estudio, pues el mantenimiento resulta muy oneroso.
Se tuvo que abrir el techo en la HGR 46 de Guadalajara.
El IMSS reconoció los hechos.
El HGR 46 está incluido en el programa.
LOS ELEVADORES
En el documento, basado en diagnóstico de 2023, el IMSS admite que los elevadores por su alta demanda para la prestación de los servicios médicos, administrativos y sociales, presentan un deterioro significativo, y que aunado a los altos costos de mantenimientos correctivos y preventivos, afecta de manera directa la infraestructura médica y no médica, la calidad de los servicios y comodidad de los derechohabientes.
El correcto uso de los elevadores ayuda a reducir la dispersión de agentes biológicos, disminuye la posibilidad de la adquisición y transmisión de infecciones intrahospitalarias. La falta de un sistema de transportación vertical es motivo suficiente para que una unidad médica no opere adecuadamente.
Luego de la tragedia.
El IMSS reconoce que por la antigüedad de los elevadores es difícil cumplir con la NORMA Oficial Mexicana NOM-207-SCFI-2018, Mantenimiento de elevadores, escaleras, rampas y aceras electromecánicas, y con la Norma Oficial Mexicana NOM-004-STPS-1999, Sistemas de Protección y dispositivos de seguridad en la maquinaria y equipo que se utilice en los centros de trabajo.
La sustitución de los 59 elevadores -de 250 a 2,000 kilogramos- se solicitó para unidades médicas y no médicas, 12 Órganos de Operación Administrativa Desconcentrada y 10 Unidades Médicas de Alta Especialidad en Chiapas, Chihuahua, DF Norte y Sur, Durango, Jalisco, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí, Sonora y Tamaulipas, así como la UMAE H ESP 2 SON, UMAE H ESP PUEB, UMAE H GO 3 CMN LA RAZA, UMAE H GO 4, UMAE H ONCO CMN SXXI, UMAE H PED 48 GTO, UMAE H TYO 21 NL, UMAE H TYO LOMAS VERDES y UMAE H TYO MAG SALINAS.
La preocupación de la imagen institucional por estos 59 elevadores obsoletos.
Los 59 elevadores que pretenden sustituirse tienen una antigüedad que va de 19 a 24 años.
En caso de aprobarse los recursos, el Seguro Social estima que se va reducir “el riesgo que ponga en peligro la integridad de personas, ya sean usuarias y personal de mantenimiento, con referencia a las caídas al cubo, tropiezo por desnivel de piso de cabina, coalición de cabina con otros elementos, atrapamiento de extremidades, choque eléctrico entre otros“, y se dará cumplimiento a las normas oficiales mexicanas sobre seguridad en la maquinaria y equipo que se utilice en los centros de trabajo.
“El servicio de elevadores (elevador eléctrico) presenta un déficit de calidad en 59 unidades médicas y no médicas, dado que una gran cantidad de esos equipos ya ha rebasado su vida útil, lo que genera fallas constantes en los mismos, molestias a la derechohabiencia e incompatibilidad con las nuevas tecnologías. La vida útil de un elevador es de 10 años de acuerdo a los Parámetros de Estimación de Vida Útil, de DOF: 15/08/2012, en su apartado: Otros equipos de transportes”, señala el IMSS.
Por la antigüedad de los elevadores estos presentan constantes riesgos de paro, es decir, no ascienden o descienden los pisos y las personas usuarias se quedan atascadas en dichas unidades.
“Los camilleros tienen que esperar para el traslado vertical de los pacientes, en el caso del elevador eléctrico tienen que subir por las escaleras, lo que representa niveles de calidad inaceptables de su servicio. Dada su antigüedad, las refacciones son escasas y se presenta un problema de compatibilidad tecnológica al programar el servicio de elevadores”, se admite.
Operar con elevadores en mal estado implica interrupciones en el servicio de traslado de pacientes en camillas, riesgo de incidentes en los traslados de pacientes en camillas, necesidad de pacientes de utilizar escaleras a pesar de las dolencias causadas por sus enfermedades, incluso atrasos o postergación de procedimientos quirúrgicos, tratamientos, o estudios, entre otros, por no disponer del equipo para transportar a los pacientes en camilla a los diferentes pisos de las unidades.
Detalles del programa de sustitución de elevadores.
El IMSS no cumple con 22 normas nacionales e internacionales sobre el uso de elevadores en unidades médicas, como la Norma Oficial Mexicana NOM-207-SCFI-2018, Mantenimiento de elevadores, escaleras, rampas y aceras electromecánicas, con las unidades en su situación actual existe mayor riesgo que ponga en peligro la integridad de personas, ya sean usuarias y personal de mantenimiento, con referencia a las caídas al cubo, tropiezo por desnivel de piso de cabina, coalición de cabina con otros elementos, atrapamiento de extremidades, choque eléctrico, entre otros.
“Actualmente 59 unidades médicas y no médicas funcionan con elevadores obsoletos
con una antigüedad que supera su vida útil de 10 años. Este equipo no ha sido sustituido con la periodicidad que se requiere (cada 10 años) por lo que hay una importante cantidad de equipo que sigue operando ya no funcionan correctamente y muestran rezagos tecnológicos en cuanto a su operación”, se indica.
En estas condiciones los elevadores de las unidades médicas y no médicas prestan el servicio en malas condiciones y paros en su servicio, lo que representa un riesgo para derechohabientes que se dirigen o regresan de cirugía, o para los pacientes que tienen que subir escaleras cuando alguna condición física se los impida.
Al menos en la operación de estos elevadores en 59 unidades médicas el IMSS no cumple un servicio de salud como en Dinamarca, como lo prometió el presidente Andrés Manuel López Obrador, ya que este proyecto podría ejecutarse en 2024, lo que representa, que no es una prioridad para la Cuarta Transformación.
El IMSS tiene mil 136 elevadores, y sólo va a sustituir 59, es decir, el 5.1 por ciento, de acuerdo con las prioridades de las autoridades de salud en México.
@Alatriste_III
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