EMEEQUIS.- La sala estaba en silencio cuando el jurado anunció el veredicto. Rubén Oseguera González, mejor conocido como “El Menchito”, heredero del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), mantenía la mirada fija, pero su destino ya estaba sellado.
En la fría Corte de Columbia, Washington, la justicia estadounidense se cernía sobre él. La declaración de culpabilidad por tráfico de drogas y posesión de armas de fuego resonaba como el preludio de una sentencia que muchos anticipaban inminente.
Detenido en 2015, “El Menchito” había sido extraditado a Estados Unidos tras un prolongado proceso, uno que ahora culminaba en una sala llena de testimonios que revelaban el lado más oscuro del cártel que su padre, “El Mencho”, había construido.
Entre esos relatos, uno en particular destacaba: Óscar Nava Valencia, alias “El Lobo”, exlíder del Cártel del Milenio, describió con escalofriante detalle cómo Rubén Oseguera planificaba secuestros y asesinatos, como piezas en un juego macabro de poder y violencia.
Pero eso no era todo. La DEA, implacable, había interceptado conversaciones secretas, grabaciones que mostraban cómo operaba “El Menchito” en las sombras. Bajo los seudónimos “Forrest Gump”, “Ice Man” y “Billy The Kid”, organizaba movimientos con precisión milimétrica.
Una de las grabaciones más escalofriantes lo mostraba hablando fríamente con su tío sobre un secuestro: “Tío, ya tengo a la persona guardada“. Las palabras, tan casuales, ocultaban el horror de lo que realmente sucedía tras esas paredes.
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El caso de Rubén Oseguera González, construido sobre una red de secretos y traiciones, apenas comenzaba a revelar el alcance del CJNG. Y aunque sus abogados intenten impugnar el fallo, con un 95% de éxito en juicios contra narcotraficantes, la justicia estadounidense parecía decidida a cerrar este capítulo con fuerza, enviando un mensaje claro al mundo: el reinado de terror de los Oseguera estaba tambaleando.
Sin embargo, en el aire, flotaba la pregunta que nadie se atrevía a formular: ¿qué vendría después? ¿Quién ocuparía el vacío de poder que “El Menchito” dejaba tras de sí?
@emeequis