Dos grupos rivales chocan en Hidalgo por el control de la cementera y ocasionan zafarrancho con armas de fuego: al momento hay 8 muertos y 11 heridos. En diciembre ya se habían enfrentado, pero es hasta ahora que el gobernador Omar Fayad pide “mesas de diálogo” entre las partes.
EMEEQUIS.– Un enfrentamiento por el control interno de Cooperativa La Cruz Azul S. C. L. dejó ocho muertos y 11 heridos, cuando un grupo disidente intentó tomar la planta cementera en la localidad de Jasso, en el municipio de Tula de Allende, Hidalgo.
Al dar a conocer el saldo preliminar del enfrentamiento ocurrido esta madrugada, en el que hubo detonaciones de armas de fuego e incendio de vehículos, el gobernador del estado, Omar Fayad Meneses, condenó “enérgicamente” estos hechos de violencia. Dijo que autoridades de la Procuraduría General de Justicia de la entidad llevan a cabo el procesamiento del lugar para determinar el número final de personas fallecidas, mientras que las personas lesionadas han sido trasladadas a clínicas para su atención.
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“He girado instrucciones a la Secretaría de Gobierno del Estado de Hidalgo, para que en coordinación con la Procuraduría General de Justicia del estado de Hidalgo además de investigar estos hechos, se puedan impulsar mesas de diálogo entre las partes y evitar que se repitan hechos tan lamentables como éste”, indicó el mandatario.
Precisó que la mañana de este miércoles, al 911 de emergencias se notificaron agresiones y disturbios entre dos grupos de personas en uno de los accesos a la planta industrial de la Ciudad Cooperativa Cruz Azul, por lo que fuerzas de seguridad resguardan la zona.
ORIGEN DEL ENFRENTAMIENTO
El enfrentamiento se originó por la disputa entre dos grupos que no se reconocen como autoridades entre sí: el de Federico Sarabia y el de José Antonio Marín. Ambos se acusan mutuamente de corrupción, operaciones con recursos de procedencia ilícita, así como robo y venta ilegal de cemento.
El pasado 15 de diciembre, después de otro enfrentamiento que inició aquella madrugada entre los dos grupos, los Consejos de Administración y Vigilancia tomaron posesión en la sede de la planta en Tula.
Aunque se registró riña, resistencia de sus opositores y acusaciones de corrupción, la nueva planta directiva fue apoyada por un operativo de seguridad de la policía estatal.
Un actuario del Poder Judicial del Estado de Hidalgo validó esta posesión.
Con base en las denuncias de los hechos por parte de cooperativistas que fueron llamados, por la alarma de emergencia, a defender la planta, este 27 de abril el grupo encabezado por José Antonio Marín intentó ingresar a las instalaciones, con personas que provenían del Estado de México y la Ciudad de México y viajaban en un convoy de autobuses.
En el choque entre ambos frentes, los que intentaban entrar y quienes buscaban impedir que esto pasara, hubo detonaciones de armas de fuego y quema de vehículos.
La cooperativa Cruz Azul también emitió un comunicado en el que condenó los hechos de violencia, además de solicitar la intervención de las autoridades hidalguenses para que se castigue a los responsables.
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