EMEEQUIS.– La mañana de este martes la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Estados Unidos en Manhattan confirmó la sentencia a cadena perpetua contra el narcotraficante mexicano y exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín Guzmán Loera.
El tribunal estadounidense rechazó los 10 argumentos con los que la defensa de Guzmán buscó la revocación de su sentencia. Para los abogados del narcotraficante, la condena debería revocarse, ya que se le negó su derecho a un juicio justo, por no tener comunicación efectiva con su abogado debido a las estrictas condiciones de prisión preventiva y una supuesta mala conducta del jurado, entre otros argumentos.
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“El juez (Brian) Cogan condujo el juicio de tres meses con diligencia e imparcialidad, luego de emitir una serie de fallos previos al juicio elaborados meticulosamente. Por las razones expuestas, se confirma la sentencia resultante del Tribunal de Distrito”, expone el documento que anula los argumentos de revocación y confirma la sentencia.
Joaquín “El Chapo” Guzán fue condenado en 2019 tras ser hallado culpable de 10 cargos relacionados con el tráfico de drogas, lavado de dinero y participación continua en una organización criminal, entre otros. Además, se aprobó la incautación de 12.7 mil millones de dólares producto de actividades ilícitas.
Su historia se remonta a 1957, cuando nació en un pequeño pueblo sinaloense llamado La Tuna en la zona del Triángulo Dorado, fértil para el cultivo de marihuana y amapola.
Llegó a la cima del Cártel de Sinaloa en 1989 tras la caída de su mentor, Miguel Ángel Gallardo. La creatividad con la que traficaba la droga —taxis aéreo y túneles, principalmente— y su sanguinaria política para manejar una estructura criminal hizo que pronto lograra ingresar más de 150 toneladas de droga a Estados Unidos.
La imagen el 11 de junio de 2003, cuando fue presentado en el penal de alta seguridad de Almoloya. Foto: PedroValtierra / Cuartoscuro.com.
DEL “701” A UN REO MÁS
Tras volverse uno de los delincuentes más buscados, fue capturado en 1993 en Guatemala, cerca de la frontera con México. Escapaba de la policía por ser sospechoso de participar en el tiroteo que asesinó al cardenal de Guadalajara, Juan Jesús Posadas, entre otros crímenes. Pasó ocho años en prisiones de mediana y máxima seguridad hasta el 2001, cuando encontró una forma de escapar.
La versión más extendida sobre su escape cuenta que el narcotraficante se escondió en un carrito de lavandería y con ayuda de un empleado de la de la prisión de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco, cruzó seis filtros de seguridad hasta quedar libre.
Tras permanecer prófugo por más de 13 años, en 2014 el presidente mexicano Enrique Peña Nieto tuiteó una noticia clave para la política de seguridad de su gobierno: “Reconozco la labor de las instituciones de seguridad del Estado mexicano, para lograr la aprehensión de Joaquín Guzmán Loera en Mazatlán”.
El sinaloense fue capturado en Mazatlán, Sinaloa. Tardó un año en escapar del “Altiplano” a través de uno de sus famosos túneles. El gobierno mexicano recibió fuertes críticas por no haber aceptado la extradición a Estados Unidos y por la poca eficacia de su seguridad en las prisiones más vigiladas del país.
Pero la tercera captura fue la vencida. “Misión cumplida: lo tenemos”, tuiteó de nuevo el presidente Peña Nieto. El 8 de enero de 2016, en Los Mochis, Sinaloa, Guzmán Loera fue recapturado con ayuda de integrantes de la Secretaría de Marina y agentes de la DEA.
Esta vez el gobierno norteamericano tomó las riendas e inició el proceso de extradición con el objetivo de encerrarlo de por vida. Y este martes se ha escrito lo que parece el capítulo final en la historia en libertad de Guzmán Loera: la confirmación de la cadena perpetua para que “El Chapo” permanezca hasta el resto de sus días en la prisión de máxima seguridad ADX Florence en Colorado.
En 2009, la revista Forbes ubicó a Guzmán Loera en la posición 701 de las personas más ricas del mundo. En el perfil publicado por el medio especializado en finanzas, se le atribuyó una fortuna cercana a los mil millones de dólares construida sobre unas 70 mil muertes.
@emeequis