EMEEQUIS.– Luego de que Gonzalo López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador fuera visto en la casa de transición de Claudia Sheinbaum, el mandatario dijo que su hijo no se unirá al gabinete de la presidenta electa.
Desde Palacio Nacional, López Obrador expresó su alegría por la decisión de Gonzalo, quien le aseguró que no tiene interés en incursionar en la política.
“Gonzalo no está metido en la cuestión política. Ha ayudado como honorífico en el Interoceánico, pero no cobra y no va a trabajar en el Gobierno. Cuando me dijo eso, me sentí contentísimo,” afirmó el presidente.
El Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec es uno de los proyectos insignia de la administración de AMLO, diseñado para conectar el Atlántico con el Pacífico a través de una ruta ferroviaria entre los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz, y Salina Cruz, Oaxaca.
López Obrador aseguró que Gonzalo ha colaborado en este proyecto de manera voluntaria, supervisando el avance de las obras y el tendido de las vías.
Además de su papel en el Interoceánico, Gonzalo y su hermano Andrés Manuel López Beltrán, también conocido como “Andy”, gestionan juntos la empresa familiar de chocolates, “Chocolates Rocío”, junto con su hermano José Ramón.
AMLO comentó con orgullo que sus hijos se harán cargo de la fábrica de chocolates. “Se va a hacer cargo de la fábrica de chocolates que tiene en sociedad con Andrés. Me puso contentísimo, porque los pobres de los hijos que ellos tienen que padecer por los papás cuando nos dedicamos a estos nobles oficios,” comentó el presidente.
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Chocolates Rocío abrió su primera sucursal en 2020 en el Centro Histórico de la Ciudad de México, en la calle Guatemala #20. Esta tienda opera de 11:00 a 17:00 horas y ha sido un emprendimiento significativo para la familia López Beltrán.
La empresa tiene sus raíces en un terreno de 52 hectáreas en Teapa, Tabasco, heredado del abuelo materno de los hermanos, donde comenzaron a cultivar cacao y cedro. “Sembraron cedro y luego cacao, y se asociaron. Buscaron variedades criollas para tener buen cacao y empezaron a hacer chocolate,” explicó AMLO.
El presidente también abordó la polémica en torno a la empresa de chocolates, que fue mencionada en un reportaje de Aristegui Noticias, vinculándola al programa gubernamental “Sembrando Vida” y sugiriendo un conflicto de interés. AMLO refutó estas acusaciones, señalando que la publicidad negativa en realidad impulsó las ventas de la tienda, que pasaron de 3,000 a 10,000 unidades al mes. “Decían que estábamos fomentando el programa de Sembrando Vida para hacer cacao y que con eso se alimentara la fábrica de mis hijos, cuando es algo muy pequeño,” comentó.
A pesar de las críticas y las acusaciones, AMLO defendió la integridad y honestidad de sus hijos. “Ellos son muy austeros y no le traen ni siquiera un chocolate al papá,” dijo en tono jocoso, reiterando su confianza en que sus hijos no son corruptos y han manejado la empresa con principios sólidos.
@emeequis